Los conocimientos adquiridos en la UNAM y el desempeño profesional y docente pude aplicarlos en la investignación del homicidio de Luis Donaldo Colosio.

Las loas al presidente Gustavo Díaz Ordaz llegaron a extremos ridículos. Se encontraba de frente a un congreso donde la voz de la oposición era nimia y los legisladores del oficialismo se permitían decir esperpentos.