Tras aterrizar la ovación estalló, los presentes, según se recuenta, alabaron la osadía del mandatario, tanto así que pidieron a la banda de artillería que tocaran cuatro dianas seguidas. Era un acontecimiento insólito

Francisco I. Madero entró a las páginas de la historia patria como el apóstol de la democracia. Trató de serlo, aunque el país no lo dejó