Ponte las botas y una mochila al hombro para emprender un viaje a través de las grietas profundas y extrañas formaciones de esta maravilla natural. Contempla el primer amanecer del año en medio de la nada

Sus playas son el paraíso, lo mismo que la labor de la Güera Rubín y las aventuras nocturnas en los rápidos del río Copalita