UAM cumple 64 días en huelga

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La Universidad Autónoma Metropolitana (UAM) cumplió 64 días en huelga. Con ello llega al conflicto laboral más largo de su historia sin que haya visos de solución.

El secretario general del Sindicato Independiente de Trabajadores de la UAM, Jorge Dorantes, consideró que el conflicto es de difícil solución, puesto que aún quedan temas pendientes en la mesa que no se han negociado. El gremio, dijo, está dispuesto a aceptar otra propuesta de incremento salarial distinta a 3.35% directo al salario que ofrece la universidad y 20% que se demandaba desde el principio.

La UAM ofrece también 3% en retabulación de puestos para personal administrativo de base y académicos, creación de nuevas plazas de base, y alzas en el pago de prestaciones, como vales de despensa.

Hay tres puntos que el sindicato exige y que la UAM no puede resolver: incremento salarial superior a lo ofrecido; sustitución de trabajadores de confianza por empleados de base y la redistribución del presupuesto para reducir los ingresos de los altos funcionarios y con ello aumentar el de los trabajadores. Eso representa 10% de las demandas en las que no se ha avanzado.

El secretario general de la UAM, José Antonio de los Reyes Heredia, coincidió en que el conflicto es complicado.

Ayer marcharon 500 estudiantes y profesores del Palacio de Bellas Artes al Zócalo de la Ciudad de México, y de ahí a la sede del Congreso capitalino para demandar que se termine la huelga.

Con consignas como: “¡Clases sí, huelga no!”; “¡Estudiar y trabajar!”, y “UAM abierta ya!”, demandaron mayor voluntad política de ambas partes, sindicato y rectoría, para resolver el conflicto.

“No aceptamos que se nos tome como rehenes en el conflicto, por lo que exigimos a las partes estar a la altura de la situación nacional y presentar en la mesa de negociación propuestas razonables para concluir la huelga”, dijo Luis Enrique Ascencio Gorozpe, estudiante de la maestría en Matemáticas.

Una de las preocupaciones es que los alumnos becados por el Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) están en riesgo de perder los apoyos, puesto que no pueden acceder a sus laboratorios y no han podido entregar los reportes de investigación.