El presidente Andrés Manuel López Obrador reconoció que el alza en los índices de delitos se debe a la falta de elementos federales para enfrentar la inseguridad y la violencia, pero aseguró que se trabaja para solucionar el problema.

“Vamos a presentar los resultados. No ha sido fácil porque ha habido una tendencia al alza de delitos en general, con pocos elementos para enfrentar el problema”, dijo en Palacio Nacional, donde el gabinete de seguridad presentó un informe sobre los avances en la materia a un año de gobierno.

El Presidente señaló que su administración inició de cero por la falta de elementos profesionales que no estuvieran en contubernio con los criminales.

“Ni había elementos de seguridad, ya saben lo que sucedía con la Policía Federal, el Ejército y la Marina, no podían actuar en materia de seguridad, había corrupción”.

Aseguró que el tema se está resolviendo y que se está avanzando, por lo que confió en que su gobierno podrá garantizar la paz.

“Estamos trabajando de manera coordinada. Otra ventaja [que hay] es la perseverancia, no permitir la impunidad, tener más policías, la Guardia Nacional.

“Ya se tiene un sistema de inteligencia eficaz que no se dedica a espiar a opositores, sino a garantizar la seguridad pública. [Nuestra] ventaja mayor es el enfoque: una estrategia que consiste en atender las causas que originan la inseguridad y la violencia”, dijo.

Acompañado por los secretarios de Gobernación, Olga Sánchez Cordero; de Seguridad y Protección Ciudadana, Alfonso Durazo; de la Defensa, Luis Cresencio Sandoval; de Marina, José Rafael Ojeda, y el comandante de la Guardia Nacional, el general en retiro Luis Rodríguez Bucio, el Ejecutivo rechazó que en el país haya ingobernabilidad, porque, dijo, en ningún caso el Estado o las Fuerzas Armadas están rebasados o impedidos para imponer orden.

“En ningún caso las Fuerzas Armadas o el Estado están impedidos o rebasados para poner orden, no hay en ningún sentido ingobernabilidad. Hay retos y desafíos, porque, como es de dominio público, se aplicó una estrategia equivocada que resultó fatal y fallida durante el periodo neoliberal”, afirmó.

Recordó que a partir de que se declaró la guerra al narcotráfico todo se descompuso.

“Ya más pruebas ni puede haber. Cuando decidimos cambiar de estrategia los conservadores y sus voceros se nos lanzaron con todo porque la realidad los puso en su lugar, están más moderados, más prudentes, pero estaban desatados. Se burlaban, decían: ‘Ahí está el abrazos, no balazos’”.

El Titular del Ejecutivo federal refirió que cuando estaba de moda “lo del uso de la fuerza y de los equipos, cámaras, monitores que iban a resolver todos los problemas, este señor [Genaro] García Luna llevaba a los periodistas a un despacho y salían complacidos.

“Y ahora no son capaces de ofrecer disculpas o de rectificar, son muy soberbios. ¿Por qué no decir: ‘me equivoqué?’, pero, bueno, ese es otro asunto”, agregó.

Andrés Manuel López Obrador destacó que ahora los mandos de las Fuerzas Armadas, en particular el secretario Luis Cresencio Sandoval y el almirante José Rafael Ojeda, son personas rectas, íntegras, defensoras de la vida.

“El problema que se tuvo es que no había ideales, no había principios en los servidores públicos, tenían demasiada ambición al dinero, a lo material, muchos deseos de vivir en mansiones, de tener departamentos en Nueva York, en Miami, carros de lujo. Ya cuando hay ese estilo de vida o cuando a eso se aspira, pues ya no es lo óptimo para el servicio público”, aseguró.

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