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Bruselas, Bélgica.— La estrategia del presidente electo, Andrés Manuel López Obrador, para restablecer la paz en México es esperanzadora, aunque también implica riesgos para la estabilidad del país, alerta en un informe International Crisis Group.

Afirma que López Obrador se ha comprometido a construir la paz a través de la lucha contra la corrupción, la legalización de las drogas, amnistías, comisiones de la verdad, así como invocando la justicia a nivel internacional.

“Su plataforma [del presidente electo] podría reducir el derramamiento de sangre, pero carece de detalles y enfrenta obstáculos que van desde represalias de los jefes del crimen organizado contra los jóvenes que desean abandonar la delincuencia, hasta la posible resistencia de las fuerzas de seguridad”, alerta.

Con sede en Bruselas, International Crisis Group es una organización especializada en solución de conflictos y cuyos informes son referencia de instancias como la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y la Unión Europea para el desarrollo de políticas.

Entre los miembros de su consejo ejecutivo están personalidades como el ex presidente colombiano Juan Manuel Santos; los antiguos primeros ministros de Suecia y Finlandia, Carl Bildt y Martti Ahtisaari, y Wesley Clark, quien fuera comandante supremo de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) durante la guerra de Kosovo.

El reporte titulado Construyendo la Paz en México: Dilemas que Enfrenta el Gobierno de López Obrador, subraya que la administración entrante hereda un país con niveles récord de violencia criminal, con conflictos desenfrenados a nivel local y marcado por la arraigada convivencia entre crimen organizado y algunas autoridades estatales.

Indica que el político de Tabasco toma las riendas de México en un momento en que la confianza en las instituciones estatales se ha erosionado a mínimos históricos después una campaña militar de 12 años contra el crimen organizado y que ha tenido como saldo más de 150 mil desaparecidos y muertos.

Para evitar que la respuesta a estos desafíos se traduzca en un mayor derramamiento de sangre y en el estallido de nuevos focos rojos, resalta que López Obrador debe superar los obstáculos que se presentan para una “rápida solución” a la corrupción y la delincuencia.

De inicio, resalta, deben evitarse las soluciones simplistas y reconocer que la delincuencia ha mutado desde 2006.

Los seis grandes cárteles que controlaban la producción y tráfico de drogas se han segmentado en docenas de pequeños grupos que han expandido sus fuentes de ingreso a otros rubros como la extorsión y el secuestro.

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