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Hoy arrancará la subasta en la que se ofertarán 218 vehículos oficiales en la Base Aérea de Santa Lucía, cuyos precios oscilan entre los 33 mil pesos y un millón de pesos.

Camionetas blindadas, vehículos marca Audi, motocicletas, tractocamiones y autobuses son algunos de los 218 vehículos que se ofertan en la subasta, a la cual se han inscrito 548 personas. El Servicio de Administración y Enajenación de Bienes (SAE) puso a disposición del público la venta de bases para participar en la subasta, las cuales se podían adquirir en las 12 delegaciones regionales del SAE en el país y en tiendas de conveniencia.

El presidente Andrés Manuel López Obrador invitó a la gente a participar y detalló que se encontró otro lote de 66 vehículos de lujo con un valor de 100 millones de pesos, que serán vendidos en otra subasta. Estos autos provienen de aseguramientos realizados por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).

“Este es otro lote que tiene que ver con 66 vehículos de lujo, machuchones. Era una bodega que se encontró, me informaron que existía, son como 100 millones de pesos que hay ahí; tienen que ver con Hacienda, son recogidos por Hacienda [al estar relacionados con] ilícitos”, dijo.

El mandatario comentó que en abril se llevará a cabo otra subasta en la que se ofertarán 54 aeronaves, entre las que se incluirán algunas de los que tienen los gobernadores actualmente.

“No es quitárselos, nosotros no nos podemos meter en esas decisiones, porque son libres, pero si los gobernadores quieren quedarse con esos aviones, incluso quieren comprar, lo pueden hacer, para los servicios públicos en los estados”, dijo.

Añadió que después subastarán “ranchos, alhajas y todo se va a subastar, porque necesitamos recursos para los programas de bienestar, regresar esto a la gente, y necesitamos recursos para la Guardia Nacional”.

Democracia, “asignatura pendiente”. Al encabezar la ceremonia por el 106 aniversario luctuoso de Francisco I. Madero, el mandatario destacó que la democracia es aún un pendiente en nuestro país, en el cual no se avanza desde Madero.

“Avanzamos con la Revolución, sin duda, en el terreno económico, en el terreno social, pero no avanzamos en el campo de la democracia. Esa es una asignatura pendiente desde Madero. Por eso recordarlo ahora es hacer el compromiso de que vamos a hacer valer la democracia en el país”, dijo.

En el Patio de Honor del Palacio Nacional, recordó que Francisco I. Madero estuvo preso y que tras su asesinato se desató la Revolución Mexicana, etapa de la historia que calificó como “la fase más violenta, más cruenta del movimiento armado”.

Previo a colocar una ofrenda floral y montar guardia de honor en memoria de Madero, López Obrador se salió del protocolo de la ceremonia al promocionar el libro Temporada de Zopilotes, de Paco Ignacio Taibo II, encargado de despacho de la Dirección del Fondo de Cultura Económica (FCE).

“Es el mejor libro que se ha escrito sobre La Decena Trágica, es el mejor trabajo histórico-literario que se ha hecho sobre el asesinato cobarde del presidente Madero y del vicepresidente José María Pino Suárez. Ya vamos a ver cómo le hacemos para conseguir los derechos de autor. No se va a publicar en el Fondo de Cultura Económica, pero a lo mejor en Planeta, con un descuento, porque son de los libros que queremos que se conozcan”, dijo.

Paco Ignacio Taibo II consideró el asesinato de Francisco I. Madero como una de las etapas históricas “más rudas, de las más ásperas, de las más dolorosas”, de la historia de México, “porque es la historia de una cadena de traiciones contra un hombre esencialmente bueno, un demócrata que fue capturado en la maraña de las conspiraciones”.

Transformación no será de la noche a la mañana. Más tarde, en una gira por Tabasco, en Macuspana llegó a una ranchería donde entregó novillonas y sementales del programa ganadero a la palabra. Ahí, López Obrador afirmó que el gobierno es como un toro viejo y reumático: “Hay que empujarlo” para echarlo a andar.

“No se puede transformar de la noche a la mañana al país, estos corruptos nos dejaron un país muy echado a perder, un país muy desdichado, porque imperó por mucho tiempo y por décadas la corrupción. Eso fue lo que más dañó a México. Tengo mucho carácter, me canso ganso que vamos a acabar con la corrupción”, subrayó.

De gira por su tierra natal, con un sombrero para cubrirse del sol y de las altas temperaturas que provocaron que en el evento paramédicos sacaran a una mujer desmayada, advirtió a sus colaboradores que si no trabajan 16 horas diarias, las acciones de gobierno se atrasarán. Enfatizó que no quiere a políticos corruptos y fantoches. Dijo a sus paisanos que cumplirá y trabajará en favor del pueblo mientras el Creador y la ciencia se lo permita.

El presidente recordó que desde hace 40 años estaban las “orejas” del CISEN espiándolo, desde que comenzó su época en Tabasco como opositor. Acompañado de los gobernadores de Tabasco, Adán Augusto López, y de Chiapas, Rutilio Escandón, así como de la secretaria de Energía, Rocío Nahle, el Ejecutivo arrancó el programa ganadero a la palabra, con el cual repartirá más de un millón 50 mil novillonas y sementales a pagar hasta cuatro años, a la palabra.

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