Oklahoma quiere que los empresarios mexicanos miren hacia aquella entidad de la Unión Americana y a partir de eso aumente el intercambio económico entre las dos partes.

El gobernador de Oklahoma, Kevin Stitt, estuvo en México para reunirse con autoridades de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) y ultimar los detalles sobre lo que será la apertura de un consulado mexicano en la Ciudad de Oklahoma, lo que para el mandatario estatal resulta de alta importancia.

Pero también agendó reuniones con hombres de negocios, sobre todo regiomontanos, para que lleven su dinero e inviertan en Oklahoma.

En entrevista con EL UNIVERSAL, Kevin Stitt, abrió las puertas de su estado a todo mexicano que busque emigrar a Estados Unidos, pero de forma legal y con ello hacer crecer la economía de esa entidad.

En el estado del centro-sur de EU, dijo, 12% de una población de 4 millones de personas es de origen hispano, en su mayoría mexicanos. Stitt presumió incluso que la migración en Oklahoma no se vio afectada, en cuanto a la economía, por la pandemia del Covid-19, porque se tomó la decisión de no obligar al cierre de comercios y centros educativos. Prácticamente, cerró quien quiso hacerlo.

¿Por qué viajó a México?

—Oklahoma ama al pueblo mexicano, era una visita pendiente. Tenemos que 12% de la población es hispana. Hay 500 mil personas hispanas viviendo en Oklahoma, de una población total de 4 millones en el estado.

Venimos a apoyar al gobierno mexicano en el anuncio que hizo de la apertura de un consulado mexicano en Oklahoma, además queremos promover el comercio entre empresas de México y Oklahoma. Empresarios mexicanos que quieran hacer negocios en Estados Unidos, que se instalen en Oklahoma y que los empresarios de Oklahoma vengan a México a hacer negocios.

¿Abrir un consulado mexicano en el estado de Oklahoma es redituable?

—Contamos con 12% de hispanos, que es un porcentaje considerable, de toda la población del estado. Es parte muy importante de la economía de Oklahoma. Actualmente, los mexicanos que deben realizar trámites consulares deben manejar a Fort Worth (Texas) o Little Rock (Arkansas).

Para ir de Oklahoma a Little Rock conduciendo es un trayecto de seis horas aproximadamente. Entonces, tener un consulado de México realmente beneficia a esta parte de la población.

La población mexicana que vive en Oklahoma comparte los valores de la gente del estado, es gente trabajadora, tiene valores familiares bien arraigados, hay muchos jóvenes emprendedores que comparten el valor de emprendimiento que existe en México con el emprendimiento con que contamos en Oklahoma.

Hay una historia sobre mexicanos que salvaron un pueblo en Oklahoma, Guyman, ¿cuál es la importancia de la migración en su entidad?

—Sí, en Guyman existe una industria muy importante de carne de cerdo, hay tanto granjas porcinas como plantas que exportan carne de cerdo de excelente calidad a todo el mundo, y la fuerza de trabajo latina mexicana en Guyman es muy importante, es gente que comparte los valores de Oklahoma, son muy trabajadores, tienen valores familiares bien arraigados, es gente que cree en Dios y apoyar a estas comunidades latinas en Oklahoma, es una misión muy importante para el gobierno actual.

Libertad ante la pandemia

¿La recuperación económica en Oklahoma está en curso?

—Al 100%. En Oklahoma la pandemia no tuvo tanto impacto porque se manejó distinto. En ningún momento se cerraron actividades. Durante la pandemia, Oklahoma tuvo un superávit y actualmente el estado tiene la cuenta de ahorro más grande que ha tenido en su historia.

Se recortaron impuestos para empresas y para las personas físicas y esa es parte de la política pro empresarial del estado, abrir las puertas a negocios locales e internacionales, y que encuentren un lugar en donde se pueda prosperar.

¿La comunidad migrante no se vio afectada por la aparición de la pandemia?

—No, las actividades en el estado no se detuvieron por la pandemia. Las escuelas siguieron abiertas, no hubo interrupción en la educación. Fue distinto a otros estados que sí cerraron, en Oklahoma los negocios siguieron prosperando y hoy las actividades continúan, la comunidad hispana, así como la gente de Oklahoma no han tenido problemas de ningún tipo.

En Oklahoma creemos en las libertades, es uno de los principales valores. El gobierno no tiene por qué decir o dictar si la gente se encierra o no, es decisión personal. Esa libertad de decisión que se promueve, es un valor que comparte también México.

¿Qué pasó con la pandemia en cuanto a hospitalizaciones y muertes?

—El Covid es un virus, pero al no haber cerrado actividades, y ello está demostrado con las cifras, Oklahoma no tuvo un comportamiento distinto frente a otros estados que sí cerraron y tomaron medidas draconianas de cerrar absolutamente todo.

El comportamiento en Oklahoma fue muy similar al de otros lugares en donde hubo dos picos: la primera ola y la segunda de la variable Delta, pero el comportamiento no fue distinto al de otros lugares y Oklahoma nunca tuvo sus hospitales llenos.

Cuando el gobierno toma medidas sobre unas cosas esto afecta a otras, por ello la actual administración tomó la decisión de no afectar la educación, porque la educación es muy importante, fue una medida adecuada. Oklahoma fue de los primeros 10 estados que distribuyeron más vacunas entre la población. Actualmente el programa de vacunación va muy avanzado.

En Oklahoma también se toma en cuenta la libertad de la gente: quien se quiera vacunar, que lo haga.

La frontera entre México y Estados Unidos ha estado cerrada, ¿Oklahoma se ha visto afectada?

—No afectó el cierre. Oklahoma es un estado que da la bienvenida a la migración legal, siempre Oklahoma ha abierto las puertas a los mexicanos que quieren emigrar a Estados Unidos legalmente. Pero como todo país, Estados Unidos quiere saber quién entra a su territorio, por eso siempre se promueve la migración, pero de manera legal.

Oklahoma abre las puertas a la migración legal de mexicanos, pues la contribución de esta población a la economía del estado es enorme: de entre 7 mil y 8 mil millones de dólares, por eso se abren las puertas.

México y Oklahoma comparten los mismos valores: gente trabajadora, gente de familia y gente que cuenta con unos valores muy arraigados.

¿México y Oklahoma tienen alguna relación particular?

—Una de las principales cosas que compartimos es el interés por la educación. Queremos que haya más estudiantes mexicanos estudiando en Oklahoma y viceversa. Oklahoma y México tienen muy buena relación desde hace muchos años; existen programas de ciudades hermanas, algunos muy exitosos en donde existe el intercambio de estudiantes, intercambio cultural.

Parte de mi visita es promover que haya más intercambio en materia de educación entre Oklahoma y México.

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