Morena reinició ayer una auditoría financiera a la gestión de Yeidckol Polevnsky por el boom inmobiliario durante su gestión, en el que invirtió 810.5 millones de pesos en la compraventa de inmuebles y en contratos de obra, y comprometió el pago por 433.4 millones de pesos más.

Estaría en duda, al menos, la legalidad y el fundamento de pagos y ofertas de pago por un total de mil 243 millones de pesos de enero de 2019 a los primeros meses de este 2020, según las primeras revisiones de la nueva dirigencia nacional, a cargo del líder provisional Alfonso Ramírez Cuéllar.

En sesión virtual del Comité Ejecutivo Nacional (CEN) de Morena realizada la semana pasada, se acordó retomar las auditorías y crear dos comisiones, una de tipo especial y otra para revisar si hubo autorizaciones estatutarias de las dirigencias estatales morenistas.

La primera será un “cuerpo técnico de abogados especialistas en materia civil y mercantil, administrativo y penal, para que emitan un dictamen sobre las posibles faltas y rutas que jurídicamente se puedan emprender” para resolver el caos inmobiliario en Morena que podría llevar a la cancelación de contratos.

Pero “si derivado de los resultados de la auditoría se desprende que se ha ocasionado daño patrimonial al partido Morena se deberá dar parte a las autoridades competentes”, establece el documento.

Las transacciones no han sido aclaradas en su totalidad, pues ha habido, según el partido, una “negativa reiterada”, hasta en cuatro ocasiones, de Polevnsky a dar información de contratos, escrituras y facturas sobre la compra de inmuebles para las sedes nacional y estatales de ese partido, por lo que se dio vista a la Comisión Nacional de Honestidad y Justicia para eventuales sanciones y se le emplazó por quinta vez.

El boom inmobiliario contempla tres bloques de inmuebles que suman mil 243 millones de pesos.

El primero fue la compra y pago total de ocho inmuebles por 127.3 millones de pesos, entre ellos uno en la Ciudad de México por 75 millones de pesos, uno en Cuernavaca por 1.2 millones, en Chihuahua por 12 millones de pesos, en Quintana Roo de 7 millones, en Guadalajara por 14.3 millones y en Zacatecas uno más de 6.1 millones de pesos.

Otros inmuebles se compraron por 288.2 millones de pesos, pero no se han finiquitado 190.9 millones. El CEN ordenó avalúos para conocer el valor real de lo adquirido, que incluye dos inmuebles en Ciudad de México, uno de 42 millones y otro de 215 millones de pesos, entre otros.

Las principales sospechas de posibles irregularidades se centran en el pago de 395 millones de pesos en dos exhibiciones por “contratos de obra”, es decir, remodelaciones y restauraciones. El contrato fue entregado en fotocopia por Joel Frías, aún secretario de Finanzas morenista, mas “no contiene las firmas de los obligados”, sólo la de Polevnsky, y existen dos versiones del documento, uno de cinco hojas y otro de 10.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses