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El gobierno de Honduras pretende iniciar acciones legales en contra de integrantes de organizaciones de la sociedad civil que fomentan la movilización, por lo que se les podría acusar de tráfico de personas, informó el embajador de Honduras en México.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el embajador de Honduras en México, Alden Rivera, destacó que al considerar que la caravana iniciada en su país fue a invitación de un grupo político, “cualquier migración que es promovida por una o unas personas, cometen el delito de tráfico de personas. Los que han hecho esta convocatoria cumplen el papel de traficar con personas al invitarlos a entrar irregularmente a otro país”.

Alden Rivera resaltó que en esa caravana se ha detectado a 19 personas que tienen órdenes de aprehensión en Honduras, de los cuales cinco fueron asegurados y entregados a las autoridades de su país. Uno de ellos por homicidio y otro por delitos contra la salud.

¿Cuál es el estatus actual de la caravana migrante que salió desde el 13 de octubre pasadode Honduras?

—La caravana, que inicialmente nació en Honduras, que fue convocada por un grupo político hondureño, que es algo completamente atípico, inició su ruta el 13 de octubre con cerca de 800 a mil personas en San Pedro Sula, pero fue ganando población que se agregó a la caravana a medida que cruzaban por territorio hondureño, conforme cruzaron por territorio salvadoreño, de tal forma que siendo primariamente una caravana de connotación hondureña se convirtió, al momento de llegar a la frontera con México, en una caravana de carácter multinacional.

Ha quedado claro que no hay visas de tránsito en México y que Estados Unidos no tiene puertas abiertas, pero la gente sigue saliendo. ¿Qué está pasando?

—La gente piensa que la caravana tiene la suficiente fortaleza para cruzar territorio mexicano y llegar a Estados Unidos. Esa expectativa ha estado continuamente alimentada por la dirigencia de la caravana, por grupos de sociedad civil que tienen presencia en toda la región.

Ese mismo grupo que está en México dirigiendo, que son organizaciones mexicanas, obviamente están vinculadas con el grupo político que convocó en Honduras, el grupo político que hoy día convoca en EL Salvador, es una especie de red que cubre toda la región y que está motivando y estimulando a la caravana primero con falsedades.

¿Qué ganan estas agrupaciones con esta movilización?

—En el caso de Honduras crear inestabilidad en el país y crear plataforma de carácter político-electoral para iniciar un proceso de proselitismo político frente a las elecciones que habrá dentro de tres años y construyen desde ahora; El Salvador tiene elecciones en febrero del próximo año, Guatemala en mayo del próximo año y habrá grupos que quieran crear conflictos a los gobiernos actuales.

Las organizaciones mexicanas como Pueblos Sin Fronteras se dedica a movilizar personas desde el Triángulo Norte de Centroamérica hacia Estados Unidos. Ellos ganan vida porque se alimentan con este tipo de movilizaciones. Ellos reciben recursos.

Son más de 5 mil personas las que han entrado a México hasta ahora, ¿en qué se diferencia de la migración que se ha dado por años?

—La diferencia es primero el origen, la condición atípica, ya que la movilidad humana en el Triángulo Norte se da por una convicción de carácter personal y de situación familiar, pero no por una convocatoria que realiza una organización. Eso nunca había pasado y eso hace que sea inédito y atípico.

En términos cuantitativos, en el caso de Honduras tenemos un flujo migratorio este año muy alto, que asciende probablemente a unas 7 mil personas por mes. Lo que sí es diferente es que se realiza en un solo momento.

Como gobiernos en conjunto, ¿es posible actuar jurídicamente en contra de estas personas que movilizan?

—Está pasando, porque en nuestros países, los ministerios públicos han considerado que este acto de convocatoria podría ser calificado como tráfico ilícito de personas, dado que se les convoca a hacer movilización de carácter regular por países que tienen leyes.

En materia de seguridad, ¿cómo van a proteger ese trayecto al norte de México?

—Seguimos preocupados por lo que pueda pasar hacia el norte. Ya tenemos evidencia de que hay integrantes del crimen organizado infiltrados en la caravana, los equipos de inteligencia de los países ya los identificaron. Ya hay halcones infiltrados que pudieran estar analizando las formas de poder tener ataques contra este flujo migratorio de distintas formas.

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