nacion@eluniversal.com.mx

Un total de 11 mil 491 mexicanos fueron desplazados su lugar de origen durante 2018 debido a conflictos políticos, sociales y territoriales, así como por la violencia generada por grupos armados organizados.

Según el informe Desplazamiento Interno Forzado Masivo en México, elaborado por la Comisión Mexicana de Defensa y Promoción de los Derechos Humanos, el año anterior se registraron 25 casos en los que miles de personas abandonaron su hogar para evitar cualquier acto de violencia.

Sinaloa, Michoacán, Oaxaca, Chiapas y Guerrero son los estados en los que más se presentó esta situación, aunque los dos últimos concentraron 90% de las víctimas.

En Guerrero hubo 5 mil 56 personas desplazadas; en Chiapas, 5 mil 35; en Sinaloa, 836; en Oaxaca, 300, y en Michoacán, 240.

La comisión recopiló estas cifras a partir de notas periodísticas y sólo tomó en cuenta los casos en los que un gran número de personas fueron desplazadas, por lo que el problema podría ser mayor.

En la presentación del informe, José Guevara Bermúdez, director ejecutivo de este organismo, consideró que el desplazamiento interno forzado es un problema ignorado por las autoridades.

“Llevamos largos años donde no ha habido una sola acción definitiva, más allá de reconocimiento de la problemática, no se atiende a todas las víctimas con política pública. Urge que se tomen medidas en esta materia”.

Agregó que si bien el actual gobierno sólo es responsable directo de 10% de los desplazados del año anterior —los registrados en el mes de diciembre—, tiene la obligación de proteger y defender los derechos de todas aquellas personas que han sido víctimas desde hace tiempo.

También añadió que los 25 casos de desplazamiento detectados fueron provocados por el uso directo de más de un tipo de violencia.

El 80% de los casos estuvo relacionado con grupos armados organizados, esto ocurrió principalmente en Sinaloa, Michoacán y Guerrero.

Otro 20% de los casos fue causado por violencia política, conflictividad social o conflictos territoriales, principalmente en Chiapas y Oaxaca.

Por último, José Guevara Bermúdez opinó que “no es necesario que se implementen leyes para acabar con el desplazamiento interno, si el gobierno estuviera interesado impulsaría políticas públicas para atender esta situación, pero no es así”.

El informe hace énfasis en que los menores de edad y los indígenas son los dos sectores poblacionales más afectados.

De los 25 casos masivos de desplazamiento registrados en 2018, en 72% había niños.

Por otra parte, de los 11 mil 491 mexicanos desplazados, 5 mil 167 pertenecían a alguna comunidad indígena. Específicamente los tzotziles, en Chiapas, y los Nahuas, en Guerrero, fueron los más afectados.

A este dato también se suma que 84% de los casos ocurrieron en localidades rurales.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses