El pleno de la Cámara de Diputados aprobó reformas al Código Penal Federal para castigar con hasta cuatro años de cárcel, una multa de hasta 200 unidades de medida y actualización (UMA) —17 mil 376 pesos— y hasta 300 días de trabajo en favor de la comunidad, a quien difunda ideas basadas en la superioridad o el odio o que por motivos racistas incite a cometer cualquier acto de violencia en contra de una persona determinada o un grupo de personas.

La reforma, enviada al Senado para su análisis, describe que a quienes formen parte de organizaciones que promuevan la discriminación racial o inciten a ella o a cualquier tipo de violencia racial se le sancionará con una multa de 50 a 100 veces el valor de la UMA.

A quien de cualquier forma asista a actividades de las organizaciones que promuevan la discriminación racial o inciten a ella o a cualquier tipo de violencia racial, incluido el financiamiento, se le sancionará con una pena de hasta tres años de prisión y una multa de hasta 300 veces el valor de una UMA.

Se describe que cuando cualquiera de las actitudes anteriores las efectúe un servidor público se incrementarán hasta en dos terceras partes.

Al fundamentar el dictamen, la presidenta de la Comisión de Justicia, Pilar Ortega (PAN), señaló que la intención es hacer visible la discriminación de orden racial. La prohibición, dijo, debe alcanzar a la actuación de los servidores públicos, porque no se debe utilizar a las instituciones para promover este tipo de ideas discriminatorias y de odio.

“Hoy damos cumplimiento a un mandato judicial que ordenó al Congreso de la Unión emitir la legislación penal para tipificar los delitos de odio racial, a través de un dictamen que se generó desde hace meses con la participación y observación de las y los integrantes de la Comisión de Justicia”, aseguró.

Precisó que el dictamen pretende dar cabal cumplimiento a la tipificación de la discriminación, el odio y la violencia por motivos raciales en la legislación penal sustantiva.

Lorenia Iveth Valles (Morena) dijo que con esta reforma se pone un alto al odio, la intolerancia y a cualquier manifestación que presuponga la superioridad de una persona sobre otra, hacerlo significa que la igualdad no sólo es una noción política, sino una práctica cotidiana.

La diputada del PRI, Mariana Rodríguez Mier y Terán, dijo que la aprobación del dictamen es un paso fundamental para eliminar la discriminación racial; sin embargo, sigue pendiente el reto que implica un cambio cultural que nos permita a todos llevarlo a la práctica.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses