La crisis en el Congreso de la Ciudad de México tiende a agudizarse, luego de que se hizo pública la renuncia de la directora de Servicios Parlamentarios, Carina Piceno Navarro, quien dejará el cargo una vez que termine el actual periodo ordinario de sesiones. Dicha decisión fue porque los diputados la responsabilizaron por dejar pasar una reforma constitucional en la que eliminaron los derechos a la jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, para presentar enmiendas legislativas. No hay que olvidar que por este hecho también salió el ahora exconsejero Jurídico, Héctor Villegas. Lo cierto es que el Poder Legislativo local tiene muchas direcciones vacantes debido a las diferencias en la bancada mayoritaria.

Las herencias en la policía

Una de las malas herencias que recibió Omar García Harfuch de su antecesor Jesús Orta Martínez, en la Secretaría de Seguridad Ciudadana, fue el tema del balizado de las patrullas, debido a que permitió a los alcaldes pintar como quisieran las unidades, con la finalidad de realzar su labor más que por un tema de la propia seguridad. Ahora don Omar tomó la decisión de cambiar el pintado de las patrullas y homologarlas, para evitar confusión entre la ciudadanía. Lo malo, nos dicen, es que se tendrán que utilizar recursos públicos para cambiar los colores, un gasto que bien pudo evitarse.

Fiscal Anticorrupción hasta 2020

Ha quedado claro que al Congreso local y al Gobierno de la Ciudad no se les da eso de los nombramientos. Primero padecieron con el caso del fiscal General de Justicia capitalino y ahora, nos platican, que se les “pasaron” los tiempos para definir quién será el fiscal Anticorrupción y quién el contralor General del Poder Legislativo, mismos que debieron proponerse hace una semana. Y ahora, como ya tienen el tema del presupuesto encima y el periodo termina el 15 de diciembre, simplemente se decidió que sea hasta enero cuando se vean esos temas. Al cabo que el tema de corrupción ni el de los recursos en Legislativo urgen, así que la Ciudad bien puede esperar al próximo año.

PRD, con ideas, pero sin fuerza

Los que quieren eliminar la facultad que tiene el gobernador mexiquense, Alfredo del Mazo Maza, de nombrar notarios provisionales son los diputados locales del PRD, porque consideran que es una forma de pagar favores políticos. La legisladora Araceli Casasola Salazar propuso una reforma legal en la materia, argumentando que las designaciones del mandatario estatal en turno violan el derecho de igualdad, libertad de trabajo y el derecho a acceder a cargos públicos. Nos comentan que esa reforma para algunos puede ser mala y para otros buena, pero el caso es que el partido del sol azteca no tiene fuerza dentro del Congreso del Estado de México y, por lo tanto, necesitará cabildearlo con las demás fracciones parlamentarias. Lo más probable es que la reforma termine en la congeladora.

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