presentó a Cristina Pino , su nueva enóloga, quien desde mayo de este año se incorporó a la empresa. Durante el evento, Pino impartió una cata para dar a conocer el nuevo vino rosado de la bodega y las etiquetas emblemáticas de la vinícola.

“La vida está llena de ciclos. Es necesario renacer para ser más fuertes y llegar a horizontes más lejanos. Sin duda, el mercado del vino está más competido, hay más marcas y más regiones. Cristina cuenta con una amplia experiencia, al sumarse con nosotros es un elemento clave para construir el futuro de la bodega. Con ella, podremos seguir sorprendiendo al consumidor con novedades e innovación, al mismo tiempo de seguir siendo pioneros en el mercado”, afirmó Santiago Cosío , director general de Bodegas de Santo Tomás .

Pino cuenta con licenciatura y posgrado en enología, se desempeñó como docente y fue la enóloga durante seis años en una reconocida bodega en Valle de Guadalupe . “Santo Tomás es la cuna de la vitivinicultura en Baja California , eso es una realidad. Por ello, es un gran reto formar parte de esta bodega. Ahora el compromiso es generar más y nuevas experiencias. Vienen muchas sorpresas y nuevos proyectos, los vamos a asombrar en muchos sentidos”, agregó Pino.

Durante la presentación, Cosío recordó a Laura Zamora , quien trabajó para la bodega 37 años, de los cuales 17 los desempeñó como enóloga. Es así que, tras jubilarse y decidir emprender un proyecto personal, Cosío se vio en la necesidad de buscar a la persona que pudiera suplir el gran puesto que dejó Zamora.

Bodegas de Santo Tomás estrena enóloga
Bodegas de Santo Tomás estrena enóloga

Cristina Pino y Santiago Cosío

Apuestan por el rosado

Para que la presentación de Pino fuera más acogedora y pudiera convivir con los invitados, impartió una cata donde el protagonista fue el vino rosado 100% Garnacha 2017. “Con este lanzamiento nos sumamos a la tendencia en el mercado por los rosados. Este vino complementa nuestra línea clásica: es una expresión adicional de lo que se puede encontrar en el Valle. Sin duda, es bastante refrescante y visualmente atractivo”, reconoció la enóloga.

Por su parte, Cosío agregó que, aunque en México el consumo de rosado es bajo, en comparación a otros países, nuestro país tienen un potencial enorme. Primero por las condiciones climatológicas, ya que es un vino que va bien con el calor, es fresco, fácil de tomar y ligero. Y segundo, porque su maridaje va excelente con alimentos más condimentados, asegurando que, cuando el mexicano descubra el potencial del rosado para maridar platillos nacionales, como son los picantes, habrá un gran despunte de esta línea.

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Durante la cata se lanzó la nueva cosecha de Duetto 2013 y también se degustó Tinta México, un vino emblemático de Santo Tomás elaborado con Barbera y balanceado con la suavidad y dulzor de la Merlot.

La velada concluyó con Eikon , el vino conmemorativo por los 130 años que cumplió Santo Tomás el año pasado.

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