Zacatecas.— Alrededor de las 16:30 horas del 31 de diciembre, en el área de población del penal varonil de Cieneguillas se realizaba la visita familiar con motivo del fin de año, incluso, se había ofrecido carne asada, pero instantes después se registró una riña entre internos con armas de fuego que dejó un saldo de 16 muertos y cinco heridos.

El enfrentamiento se desató entre presos de los cárteles de Sinaloa y del Golfo, quienes se disputan el control, informó en entrevista con EL UNIVERSAL, Ismael Camberos Hernández, secretario de Seguridad Pública del gobierno estatal.

El mando policial reconoció que hubo fallas en su equipo de trabajo, ya que el uso de las armas de fuego sólo revela que hubo posible complicidad, y por ello en la indagatoria de la Fiscalía General de Justicia de Zacatecas se enfoca a todo el personal para deslindar responsabilidades.

“Se está llamando a entrevista a todos los custodios que estaban en turno; son 60, pero también ya se encontraron cuatro armas y unos escondites en los módulos (…) se investiga a todo el personal, al director, a todos los jefes de guardia, al jefe del turno. Todos, todos deben ser investigados”, detalló.

El funcionario estatal explicó que esta riña ya estaba planeada posiblemente por los internos afines al Cártel de Sinaloa, quienes tenían la intención de eliminar a sus rivales, aunque rechazó conocer cómo fue que ingresaron al penal las cuatro armas de fuego decomisadas, pues dos días antes sus elementos estatales realizaron un operativo sorpresa para decomisar objetos prohibidos, y no los detectaron.

Camberos Hernández planteó que se tienen dos hipótesis: una, que las armas ingresaron ese mismo día con la visita o que hay escondites en los módulos, ya que tras los hechos, las armas fueron halladas ocultas en éstos en unas artesanías de madera.

Identifican a víctimas

A 24 horas de la riña, la Secretaría de Seguridad Pública del estado dio a conocer la lista de los 16 muertos en el enfrentamiento en el interior del penal.

Los reclusos procesados fallecidos son Gustavo Adolfo López Flores, Cruz Ángel Soto Domínguez, Tomás Franco Estrada, Martín Macías Santa Cruz, Jaime Alberto Dueñas Arias, Rodrigo Chairez Mercado, Roberto Casimiro Terán, David Francisco Mireles Reyes, Ernesto Zapata Macías y Gerardo Sánchez Jaime.

En tanto, los internos que estaban sentenciados y que fallecieron en los hechos son Mateo Dorantes Durán, Eduardo Adame Gómez, Jesús Alejandro Díaz López, Luis Aguilar Piña, José Pedro Pérez Padilla y Moisés Jara Nájar.

Sin sobrepoblación

Ismael Camberos Hernández descartó problemas de sobrepoblación en el penal de Cieneguillas, pues tiene una capacidad para mil 250 personas, y el día de la riña había mil 124 presos —de los cuales 450 pertenecen al fuero federal—, por lo que se encuentra a 90% de su capacidad.

Sin embargo, reconoció que en cuestión de gobernabilidad, este reclusorio tiene tareas pendientes, debido a que con este hecho se vulneró la seguridad, por lo que ahora se han adoptado más medidas al respecto.

Entre las disposiciones que implementaron ahora están que los internos no salgan a las áreas comunes, pues se les mantiene en sus módulos y se restringieron las visitas.

Además, se realizarán revisiones continuas para descartar la presencia de más armas de fuego dentro del Cereso, y varios reclusos serán reubicados para evitar más confrontaciones.

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