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Pachuca.- Obsidiana suprema, textiles, bordados, carrizos, latón, ixtle, palma y madera forman parte de los materiales de uno de los nacimientos más representativos de Hidalgo, que desde el 24 diciembre es expuesto en una de las salas del Museo del Vaticano.
Resaltan entre las piezas un Niño Dios negro hecho a base de obsidiana suprema de las minas de Nopalillo, del municipio de Epazoyucan, única en el mundo por su color.
De acuerdo con el secretario de Cultura, Olaf Hernández Sánchez, a invitación de los museos vaticanos, artesanos hidalguenses confeccionaron las piezas del nacimiento en distintas técnicas y materiales que representan a esta entidad.
La obra, que recrea el tradicional nacimiento con piezas de 1.60 metros de altura, fue elaborada durante dos meses por artesanos de diversos municipios y esta expuesta en el Aula Paola VI de Museos del Vaticano del 24 al 2 febrero.
Foto: Especial
Para la realización se utilizaron materiales como cera, madera, obsidiana, latón, barro, carrizo y fibras. En este nacimiento se decidió la creación de dos niños Dios, uno de ellos hecho a base de obsidiana suprema.
Una segunda pieza fue el elaborada por el artesano Rafael Castillo con madera de cedro de la comunidad de Carpinteros en el municipio de San Agustín Metzquititlan, que requirió varios procesos de tallado y lijado para adquirir la textura tipo mármol.
El resto de las figuras que representan el nacimiento fueron creadas por el artista Silvino López, con una altura de 1.60 las piezas se elaboraron con una base de fibra de vidrio y tallado de madera.
La vestimenta de cada una de las piezas la realizaron artesanas de los municipios de Ixmiquilpan, Chilcuautla, Tenango de Doria, Atlapexco y Acaxochitlan en bordado de pepenado y tenango. También se utilizó latón, carrizo, barro, ixtle, hilo de lechuguilla y palma.
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afcl
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