Desde que se convirtió en “científico” el influencer Sebastián Villalobos tiene el objetivo de mostrar que no hay edad para interesarse por la ciencia y que, aunque se fracase a la primera, siempre se puede volver a intentar.

Tan sólo él, apenas hace un año, descubrió que también podía hacer experimentos desde casa al formar parte del programa NatGeo Lab, del que es conductor y con el que este lunes estrena su segunda temporada.

“El chiste es no dejar de experimentar, de probar, de intentarlo y es como un mensaje subliminal para la vida porque la vida funciona de esa misma manera”, comenta a EL UNIVERSAL.

“Vamos a encontrar muchas puertas cerradas que, si a la primera nos devolvemos, pues nunca vamos a encontrar ese objetivo que estamos buscando”.

El creador de contenido llevará a los pequeños a armar un disfraz invisible, estrellas fugaces caseras, una tormenta de nieve y hasta unas piernas robóticas, pero espera también los adultos se dejen llevar por la experiencia.

“Nunca es tarde para aprender, por eso tenemos ese interés de que los padres se puedan involucrar con sus hijos; al momento de poder hacer cualquiera de los experimentos recalcamos que se necesita estar en compañía con los padres”, señala.

“Queremos recuperar esos espacios que sentimos que se han perdido, donde papá e hijo tengan la oportunidad de trabajar en equipo olvidándonos de los aparatos tecnológicos y de todo lo que rodea el 2019 y lo que viene en adelante”.

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