En una época en que se discute la presencia femenina en el cine nacional, tanto atrás de la cámara como con personajes complejos, las mujeres son quienes representarán a México en la sección Horizontes Latinos del Festival Internacional de Cine de San Sebastián.
Mientras Fernanda Valadez llegará con Sin señas particulares, historia donde una madre busca a su hijo desaparecido, Yulene Olaizola estará con Selva trágica, situada en 1920 donde la naturaleza toma revancha contra los hombres que intentan tomar sus tesoros.
La tercera producción es El prófugo, una historia que es dirigida por la argetina Natalia Meta, pero que fue coproducida por la regiomontana Lorena Villarreal (Las lloronas) y en la cual una actriz de doblaje comienza a tener modificaciones a su voz, tras un hecho traumático.
“Para un festival siempre va a ser más difícil tener más directoras porque hay pocas en el mundo; doy clases de cine desde hace seis años y nunca he tenido a más de cinco alumnas en un grupo de 15”, comenta Olaizola.
“Sabemos que el mundo no es parejo en oportunidades y demás, pero sí ha quedado claro que cada vez hay más mujeres en el cine y que las películas están ahí no por hacernos un favor sino por su calidad y este año todavía es más competitivo, porque muchas películas que pudieron ser estrenadas en Cannes o Locarno, festivales que se cancelaron, ahora están buscando los mismos”, abunda.
Sin señas particulares, protagonizada por Mercedes Hernández y David Illescas, regresa al certamen español luego de que el año pasado estuviera en Cine en Construcción, que ayuda a terminar largometrajes.
Sigue a una mujer que busca a su hijo desaparecido en el camino hacia la frontera con EU, encontrándose con un hombre, recién deportado, que espera ver de nueva cuenta a su madre.
“Hicimos un trabajo documental buscando testimonios, hay un gran número de investigaciones periodísticas, relatos como los de Javier Valdez”, recuerda Valadez.
“Los desaparecidos es algo que se empezó a gestar desde sexenios anteriores y es triste ver que en este no se ha hecho gran diferencia; lo más importante de la pelícua es que el foco es el trabajo hecho por las familias que no paran en buscar a sus integrantes, como el de una madre”, rescata Astrid Rondero, productora.
Selva trágica, de Yulene Olaizola, llegará cargando tras de sí participación en el festival de Venecia y confirmación en otros como Nueva York.
Filmada en la selva fronteriza entre Belice y México, sigue la vida de trabajadores de una compañía chiclera que se internaban en la vegetación por ocho meses y cuya vida se ve afectada con la llegada de una chica.
“Mi primera película, Intimidades de Shakespeare y Víctor Hugo, se exhibió ahí hace 12 años y fue mi primer festival de categoría A al que asistí, eso lo hace especial y aparte tengo orígenes vascos, tengo familia allá y será especial poder mostrar mi trabajo allá”, expresa Olaizola.
El prófugo, en tanto, tuvo locaciones en Cancún y tendría su estreno en México de la mano de Villarreal, la coproductora.
“Es una apuesta original que tiene como protagonista a una actriz de doblaje quien, después de un suceso trágico, siente una alteración en su voz que la lleva a pensar que está poseída.
“Creo más allá de la original premisa, en la coyuntura actual es importante sobre la violencia de género, las relaciones tóxicas”, apunta Julio Chavezmontes, uno de los productores del lado mexicano.