Por donde voy estos días escucho o leo a ciudadanos decepcionados.

A la mayoría los ubico en dos extremos: mientras unos están decididos a ir a votar por el “menos peor” (como sea todos pertenecen a un sistema de partidos políticos podridos); otros están dispuestos a anular su voto y así gritar su descontento por la clase política con la esperanza de que su desplante sea escuchado.

Siempre habrá personas que creen en un candidato en específico o un partido, pero la verdad es que en mi círculo estos son muy pocos… aunque existen.

En este contexto, se me van los ojos para todo lo que está sucediendo en España. El pasado fin de semana partidos políticos que nacieron de movimientos ciudadanos —Podemos y Ciudadanos— han ganado elecciones importantes.

Una de ellas es Ada Colau, de 41 años, quien con el movimiento Barcelona en Comú ganó la segunda ciudad más grande del país. Ella, que nació al activismo político defendiendo a los muchos jóvenes que no podían pagar sus hipotecas, ahora mandará a la policía por la que fue detenida. Ella, que se disfrazaba de “Supervivienda”, una “heroína” con los colores amarillo y negro (con todo y capa y antifaz) para defenderlos, ahora tendrá el reto de gobernar.

Será muy interesante. No sé si lo haga bien, pero merece la pena (como dicen allá) seguirle la pista. Desde ahora hay personas que lo mismo pronostican una nueva forma de hacer política que el riesgo de un gobierno populista tipo Venezuela.

Verdad de Perogrullo: México no es España; lo que pase allá no puede transferirse a nuestro país de inmediato. Las reglas son diferentes; la composición de edad de la población también, en fin, muchas cosas. Pero sí puede inspirar…

En México vivimos la última elección federal de su tipo y qué bueno. A partir de la siguiente, la de 2018, las reglas cambiarán: una reforma político-electoral aprobada desde 2014 permitirá la famosa reelección de legisladores (hasta por 12 años) y la formación de gobiernos de coalición para la Presidencia. No es menor.

A partir de 2018 el Presidente —quien quiera que sea— tendrá que buscar la aprobación de todo su gabinete —menos los secretarios de Defensa y Marina— en la Cámara de Senadores. También estamos estrenando la posibilidad de las candidaturas ciudadanas. Aunque aún los partidos políticos tienen la sartén por el mango en cuestión de prerrogativas, estructura y demás, ya tenemos —al menos— un candidato ciudadano Jaime Rodríguez Calderón El Bronco, quien ha puesto a temblar a todos en Nuevo León, nada menos que uno de los estados más importantes donde hay elecciones el 7 de junio.

Los detractores de El Bronco, curiosamente, dicen lo mismo que de Colau: advierten de la sombra del populismo venezolano; otros, la reminiscencia de Fox, candidato “bronco” que dijo que todo lo arreglaría en 15 minutos porque era muy fácil y no pudo/quiso cambiar nada.

¿Un candidato independiente a la Presidencia? ¿Por qué no? ¿Quién podría ser? La sola pregunta inaugura emocionantes tiempos.

Lo escribió ayer Susana Moscatel en su página de Facebook y lo retomo por ser un comentario a la par de ingenioso y real: “Mañana convocamos a los carteros para hacer bloqueos callejeros en contra de los e-mails. A los fotógrafos por las cámaras en los celulares, a los maleteros por las rueditas en las petacas y a la gente en la industria naviera por los aviones”.

Se refería, claro, al debate airado por el #UberSeQueda/#UberSeVa.

Por lo pronto el 25 de mayo (fecha en que los taxistas tradicionales tomaron las calles en protesta por Uber) provocaron algo inaudito: la aplicación del servicio de taxis por celular recibió 800% más descargas por parte de consumidores.

Elocuente, ¿a poco no?

La CNDH ya abrió un expediente sobre los hechos registrados el viernes pasado en Tanhuato, Michoacán.

Resalta la necesidad de realizar las investigaciones sobre lo registrado en esa localidad y en Apatzingán el pasado 6 de enero, que se realicen con “objetividad, imparcialidad y exhaustividad, para evitar incurrir en violaciones a derechos humanos y se propicie que efectivamente se llegue a la verdad”.

En una declaración sorpresiva, Rigoberta Menchú ayer llamó a los padres de los normalistas de Ayotzinapa a "decir la verdad" sobre sus hijos. Justo al cumplirse en el octavo mes de desaparición de los jóvenes, la Premio Nobel también llamó a las autoridades a no ceder a los "chantajes".

¿De qué está hablando Menchú? ¿De cuándo a acá está tan enterada de las investigaciones?

Ella misma parece descalificarse al decir que de haberlo hecho, hubiera solicitado un "diagnóstico psicosocial para ubicar el contexto" en que se registró la desaparición.

Por cierto, los integrantes del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la CIDH que sí investigan la desaparición de los normalistas y las versiones oficiales, siguen insistiendo en hablar con los integrantes del 27 Batallón de Iguala. Hasta el momento no les han dicho que sí. La secretaría de Gobernación informó que en los próximos días dará una respuesta.

Querétaro es otro de los Estados que estará en disputa el 7 de junio. Actualmente gobierna el PRI desde 2009 con José Calzada Rovirosa, quien le arrebató el gobierno al PAN.

Francisco Domínguez Servién va por Acción Nacional. Es cercano a Ernesto Cordero, léase Felipe Calderón.

Apenas intentó poner su ejemplo al presentar su declaración patrimonial, fue severamente criticado porque omitió algunas de sus propiedades.

Primero declaró una casa, tres autos, joyas, obras y cuentas bancarias, en total 3 millones 400 mil pesos. Pero debido a que el PRI lo delató, tuvo que remendar su declaración y añadir otros 3 terrenitos a nombre de su esposa y uno de sus hijos.

Su esposa es Karina Castro, nieta del ex gobernador queretano Juventino Castro Sánchez.

Hay que darle un reconocimiento: logró reunir en uno de sus actos de campaña a Felipe Calderón y Gustavo Madero.

A principios de este mes, Pancho Domínguez fue balconeado con un audio en donde se le escucha hablar a Carlos Mendoza, candidato panista al gobierno de Baja California Sur, hablando de un acuerdo con un empresario, de apellido Kors, para recibir 30 millones de pesos durante toda la campaña. Aunque el candidato panista reconoció que sí recibe dinero de empresarios, dijo desconocer a Kors. El lunes pasado, Salvador Gabriel López, del Movimiento Ciudadano declinó su candidatura a favor del abanderado panista.

El candidato con el que el PRI intentará retener la gubernatura es Roberto Loyola Vera, hermano del ex gobernador panista de nombre Ignacio.

Pese a que el PRI criticó al candidato panista por omitir propiedades en su declaración, el abanderado priísta no ha cumplido con su #3de3. Eso sí, en su portal de internet se puede conocer la lista de las 39 propiedades --entre casas, terrenos, despachos y locales--que tiene él, su esposa y descendientes. El más caso es un terreno en La Purísima, de 12 millones 615 mil 735 pesos, y el único cuyo propietario es "otro".

Por el PRD va Adolfo Camacho Esquivel, quien entre sus propuestas hechas en caso de que llegue a la gubernatura está el de reducir a 75 mil pesos su salario. Actualmente es de 150 mil.

Por MORENA va la magistrada con licencia Celia Maya García. En caso de ganar, su salario sería de 110 mil pesos, menor al que ahora percibe que es de 141 mil 582 pesos.

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