Van y vienen acusaciones... y en medio, el escritor Sergio Pitol

Los 85 años de Sergio Pitol, que el Instituto Veracruzano de la Cultura comenzó a celebrar ayer con la partida de un pastel en la casa del escritor, traductor y diplomático, se darán en medio de la polémica que aún continúa, entre amigos y parientes del autor de El arte de la fuga. La acusación contra la Universidad Veracruzana es directa, la familia del escritor asegura que esa casa de estudios, a la que Sergio Pitol dio tanto, ni siquiera ha levantado la mano para celebrar a su catedrático emérito, incluso peor, acusan que la Universidad que dirige la doctora Sara Ladrón de Guevara retiene las regalías de las obras de Sergio Pitol y sus honorarios.

De nuevo, se van contra el Munal

Después de que hubo quienes se escandalizaron el año pasado cuando en el marco de la exposición Melancolía, el Museo Nacional de Arte invitó al público a bailar salsa en el salón de recepciones, hoy los enardecidos no perdonan que en el mismo museo se esté convocando a un taller para enseñar memes. Basta darse una vuelta por las redes sociales para descubrir cómo han surgido cientos de especialistas en los roles que debe tener un museo. Nos cuentan que los comentarios van desde los que ya concluyeron que este tipo de ejercicios puede llevar a que se pierda el sentido de este recinto o que acusan que se malgastan los recursos y las instalaciones del MUNAL, hasta los que se han declarado fans del museo y le juran amor eterno. Son más de 500 comentarios, tan sólo en Facebook y entre éstos se ha colado uno que otro meme, cuya calidad muestra por qué les es urgente tomar el taller.

Otra vez llegó el INAH demasiado tarde

Otro caso de demolición ilegal del patrimonio histórico tuvo lugar hace unos días en las afueras de Mérida, Yucatán. En redes sociales y medios locales, se ha dado cuenta de la demolición del casco antiguo de la hacienda San Pedro Cholul, catalogada por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH). Construida en la segunda mitad del siglo XIX, el inmueble correspondía a un complejo henequenero que floreció en el siglo XX. Según fuentes locales, el INAH acudió a suspender la obra ejecutada por una constructora inmobiliaria porque no contaba con los permisos necesarios, pero llegó tarde, pues del edificio histórico solo quedaron en pie algunos muros y la chimenea. En videos de redes sociales se puede ver que el personal del INAH encontró solo unos cuantos pedazos de muros donde pegar los sellos. ¿Habrá castigo ejemplar esta vez?

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses