La euforia vivida en el 14 de agosto de 1945 provocó que Alfred Eisenstaedt tomara una de las fotografías más importantes dentro de la cultura popular: el beso entre un marinero y una enfermera.

Cinco años más tarde, en 1950, un fotógrafo francés tomó otra de las imágenes más celebradas en torno al beso: "Le baiser de l'hôtel de ville" ("Beso frente al Hotel de Ville, Francia", en español). En el Día Internacional del Beso recordamos al artista.

Robert Dosnieau

, autor de esta instantánea, pidió a dos jóvenes posar para esta fotografía para mostrar un mundo donde todo está bien, de acuerdo con la información del libro Detrás de la cámara.Los fotógrafos más legendarios de nuestra época (Numen, 2017).

Robert Doisneau, fotógrafo del beso francés
Robert Doisneau, fotógrafo del beso francés

Robert Doisneau tomó esta fotografía de dos jóvenes besándose. Ha causado polémica porque se trata de una pareja de actores. Foto: Museo de Fotografía de Rotterdam vía EFE

Esta imagen ha causado polémica dentro de los círculos fotográficos al no ser una captura de la realidad, sino una escenificación lograda por el creador francés. En el retrato destaca la expresión de los transeúntes que rodeaban a la pareja de actores.

De acuerdo con la misma publicación, Dosnieau miró "una realidad de la que narraba los aspectos más poéticos y nimios. Él era una criatura del vecindario".

Al fotógrafo le gustaba definirse como "el pescador de imágenes". Organizaba obras cortas y las grababa para ver el mundo como le gustaría que fuera y hallaba en el amor y la inocencia infantil la posible salvación del mundo.

Robert Doisneau, fotógrafo del beso francés
Robert Doisneau, fotógrafo del beso francés

"Autoretrato de Doisneau en 1947". Robert Doisneau era llamado "un poeta de la vida diaria". Fotografía: Atelier Robert Doisneau vía EFE

De acuerdo con el libro Master Photographers (Flammarion, 2012), Doisneau "era un poeta de la vida diaria" que nació en 1912 en los suburbios de París. Recorrió cada rincón de la ciudad y las calles le dieron historias y personajes para retratar.

"Las maravillas diarias son emocionantes; ningún director de cine podría controlar las cosas inesperadas que encuentras en la calle", decía.

El mundo de Doisneau está repleto de amantes apasionados besándose entre el tráfico de la ciudad, niños y otras personas que se encuentran en la vida diaria.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses