Más Información

Sheinbaum se reúne con José Medina Mora en Palacio Nacional; asumirá la presidencia del CCE el 10 de diciembre, detalla

EU entregó a México lista con nombres de espías rusos, reporta el NYT; el gobierno mexicano los dejó quedarse, dice

Embajada de EU pide información sobre paradero de Ryan Wedding, exatleta ligado al Cártel de Sinaloa; recompensa es de 15 mdd

Sheinbaum entra a la lista de las 67 personas más elegantes de 2025; The New York Times destaca los bordados mexicanos en su indumentaria

“Es un camino largo, pero con amor lo hace uno”; peregrinos de diversos estados comienzan a llegar a la Basílica de Guadalupe
Así inicia un poema que de pequeños solíamos declamar en el concurso organizado por el colegio en la primaria... MÉXICO CREO EN TI... PORQUE TU NOMBRE SE ESCRIBE CON X, QUE ALGO TIENE DE CRUZ Y DE CALVARIO.
Y hoy, después de haber vivido los dos terremotos más fuertes que han azotado a este hermosísimo país llamado MÉXICO, mi corazón grita esta estrofa más fuerte que nunca… sí, hoy más que nunca: CREO EN MÉXICO, creo en los mexicanos, creo en nuestra gente, creo en el corazón inigualable del mexicano, en su empatía por los necesitados, en su cariño por el desconocido en desgracia, en su desprendido corazón que sin ver a quién, late más fuerte cuando las circunstancias así lo requieren; creo en ese mexicano que sabe restarle a su magra dieta para compartir con los desamparados y azotados por la madre Tierra.
Creo en ese mexicano que ante las inclemencias del clima, sabe donar su tiempo, su esfuerzo, sus conocimientos, sus lágrimas, sus manos, sus pensamientos, sus ahorros, su ropa, su fuerza, su dolor, su corazón... todo a quienes lo necesitan.
No puedo negar que también estoy muy triste, lo sucedido no es para menos, porque sin importar quiénes han sido los damnificados, lo que les ha pasado a ellos nos ha pasado a todos... su dolor es nuestro dolor, su frío es nuestro frío, su angustia es nuestra angustia, su pena es nuestra pena, su hambre es nuestra hambre... y precisamente porque este es el mexicanísimo sentimiento del muégano, cuando una cobarde agresión de la naturaleza se cierne con algunos de nosotros, el resto saltamos a defenderlo.
MENTIRÍA si dijese que no estoy afectado, me siento triste, apagado, confundido, con miedo, con ganas de gritar a todo pulmón mi enojo y mi rabia contra ese fenómeno natural que cobardemente y sin previo aviso nos agrede y nos golpea tan descarada y desgarradoramente fuerte.
¿POR QUÉ MADRE TIERRA, si en un momento decides llamarnos la atención, por qué no lo haces de frente? ¿POR QUÉ decides castigarnos y marcarnos con tanto dolor y sufrimiento?
Estoy triste y me siento impotente ante la madre Tierra. Pero también es cierto que mi corazón se llena de luz y esperanza cuando veo la respuesta de miles y miles de mexicanos que ante la desgracia anteponen al prójimo. Me queda claro que el mexicano es un chingón, que sabe comprender “al otro”, al necesitado, que se quita la camisa para ayudar a quien la necesita más sin esperar nada a cambio, ofrece su mano, su fuerza, su sonrisa, sus conocimientos, su tiempo, su sudor, su cuerpo y su alma para apoyar al otro mexicano.
Me llena de esperanza ver a esos miles que están ahí sin buscar recompensa personal alguna, porque otro mexicano lo necesita y está en riesgo y porque así es el corazón del mexicano... enorme, eterno, cariñoso y amoroso.
PD.- MÉXICO: CREO EN TI... eres un país de poca madre... un país chingonsísimo... eres nuestro querido MÉXICO.
futbol@eluniversal.com.mx
Y hoy, después de haber vivido los dos terremotos más fuertes que han azotado a este hermosísimo país llamado MÉXICO, mi corazón grita esta estrofa más fuerte que nunca… sí, hoy más que nunca: CREO EN MÉXICO, creo en los mexicanos, creo en nuestra gente, creo en el corazón inigualable del mexicano, en su empatía por los necesitados, en su cariño por el desconocido en desgracia, en su desprendido corazón que sin ver a quién, late más fuerte cuando las circunstancias así lo requieren; creo en ese mexicano que sabe restarle a su magra dieta para compartir con los desamparados y azotados por la madre Tierra.
Creo en ese mexicano que ante las inclemencias del clima, sabe donar su tiempo, su esfuerzo, sus conocimientos, sus lágrimas, sus manos, sus pensamientos, sus ahorros, su ropa, su fuerza, su dolor, su corazón... todo a quienes lo necesitan.
No puedo negar que también estoy muy triste, lo sucedido no es para menos, porque sin importar quiénes han sido los damnificados, lo que les ha pasado a ellos nos ha pasado a todos... su dolor es nuestro dolor, su frío es nuestro frío, su angustia es nuestra angustia, su pena es nuestra pena, su hambre es nuestra hambre... y precisamente porque este es el mexicanísimo sentimiento del muégano, cuando una cobarde agresión de la naturaleza se cierne con algunos de nosotros, el resto saltamos a defenderlo.
MENTIRÍA si dijese que no estoy afectado, me siento triste, apagado, confundido, con miedo, con ganas de gritar a todo pulmón mi enojo y mi rabia contra ese fenómeno natural que cobardemente y sin previo aviso nos agrede y nos golpea tan descarada y desgarradoramente fuerte.
¿POR QUÉ MADRE TIERRA, si en un momento decides llamarnos la atención, por qué no lo haces de frente? ¿POR QUÉ decides castigarnos y marcarnos con tanto dolor y sufrimiento?
Estoy triste y me siento impotente ante la madre Tierra. Pero también es cierto que mi corazón se llena de luz y esperanza cuando veo la respuesta de miles y miles de mexicanos que ante la desgracia anteponen al prójimo. Me queda claro que el mexicano es un chingón, que sabe comprender “al otro”, al necesitado, que se quita la camisa para ayudar a quien la necesita más sin esperar nada a cambio, ofrece su mano, su fuerza, su sonrisa, sus conocimientos, su tiempo, su sudor, su cuerpo y su alma para apoyar al otro mexicano.
Me llena de esperanza ver a esos miles que están ahí sin buscar recompensa personal alguna, porque otro mexicano lo necesita y está en riesgo y porque así es el corazón del mexicano... enorme, eterno, cariñoso y amoroso.
PD.- MÉXICO: CREO EN TI... eres un país de poca madre... un país chingonsísimo... eres nuestro querido MÉXICO.
futbol@eluniversal.com.mx
Noticias según tus intereses
[Publicidad]
[Publicidad]









