¿Qué es la ergonomía? ¿Para qué sirve?

La ergonomía es una disciplina interdisciplinaria en la que participan distintos especialistas como médicos, ingenieros, psicólogos y diseñadores, entre otros. Es responsable de estudiar cómo nos relacionamos con los objetos, los entornos o aspectos organizacionales y ambientales.

La maestra Gloria Adriana Mendoza Franco , coordinadora del área de Ergonomía en el posgrado de Diseño Industrial de la UNAM, explica que se han documentado varios orígenes de la ergonomía. Uno ocurrió durante la Revolución Industrial cuando se necesitaban diseños específicos que permitieran aumentar la productividad de las máquinas y evitar accidentes.

Otro origen tuvo lugar en la medicina, específicamente con la medicina ocupacional, la cual se enfocó en los padecimientos, lesiones y accidentes de trabajo.

También la psicología aportó un origen a esta disciplina, desde el surgimiento de la psicología ocupacional o laboral, en donde se cuestionaban padecimientos psicológicos relacionados con el trabajo , las máquinas y nuestra relación con los sistemas productivos.

Distintas características

Hoy la ergonomía cumple con dos objetivos. El primero está enfocado en optimizar el funcionamiento de un sistema y el segundo en buscar el bienestar humano.

De acuerdo con la maestra Mendoza Franco, la Asociación Internacional de Ergonomía divide la ergonomía en tres grandes áreas: física, cognitiva y organizacional. Agrega que varios autores también hablan de la ergonomía cultural, que sería la comprensión de todos los aspectos culturales que determina nuestra relación con el entorno.

La ergonomía física está enfocada al estudio del cuerpo humano, sus dimensiones, proporciones, tallas, biomecánica, movimientos, esfuerzos y su relación con el entorno.

La cognitiva es responsable de estudiar todos los procesos mentales o cognitivos y su relación con estas interacciones entre humanos y el entorno. Y, por último, en la ergonomía organizacional se abarcan aspectos de normas, de jerarquías, de diseño de trabajo.

En palabras de la académica de la UNAM , es importante diseñar con un enfoque ergonómico, “es decir, tratamos de acercarnos lo más posible a los ideales ergonómicos, porque todos los productos son siempre mejorables, las condiciones van cambiando y éstos tienen que ir cambiando también.”

Aspectos que marcan un diseño ergonómico son que los productos sean aptos al cuerpo humano, que sean eficientes, fáciles de usar, intuitivos y tolerantes al error, que desde que nos enfrentamos a un producto nuevo sepamos como usarlo y que se apoye en la antropometría, o sea, del estudio de las dimensiones y proporciones corporales.

Ciencia UNAM, Dirección General de Divulgación de la Ciencia