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Una combinación de un renovado nacionalismo, gobiernos populistas y otros factores económicos desfavorables han llevado a que la autonomía de los bancos centrales se ponga en tela de juicio, advirtió el director general del Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (Cemla), Manuel Ramos Francia.

Consideró que los institutos centrales deben hacer un gran esfuerzo por mantener su legitimidad y autonomía en un ambiente adverso.

El exsubgobernador del Banco de México (Banxico) ponderó que la coyuntura presenta importantes retos en términos de la autonomía de los institutos centrales.

Uno de ellos es el relacionado con los movimientos populistas y nacionalistas en el mundo, los cuales han criticado a estos organismos.

Estableció que mientras los bancos centrales deben ser, y se han mantenido políticamente neutrales, por el contrario, varios políticos no han titubeado en obtener ganancias atacando a estas instituciones.

Populismo pone en jaque a los bancos centrales, dice Cemla
Populismo pone en jaque a los bancos centrales, dice Cemla

Mencionó que se puede argumentar que han existido casos en los que los presidentes han logrado la salida de funcionarios de la banca central: “Lo anterior presenta una amenaza a su autonomía”.

En defensa. Ramos Francia cuestionó sobre los factores que pueden coadyuvar a legitimar y mantener la autonomía. A lo que consideró que no existen recomendaciones puntuales sobre lo que un banco central puede hacer para lidiar con el riesgo de perder su libertad.

Planteó a las instituciones explicar al ciudadano los beneficios de la autonomía y diseñar de manera clara sus responsabilidades.

También pidió aclarar cuáles son los alcances de la política monetaria, enfatizar la transparencia y las revisiones periódicas del desempeño de la institución por otros poderes del Estado. Además de elaborar planes con entidades del gobierno cuando existan contingencias en las cuales la autonomía esté en riesgo.

Impuesto antidemocrático. Al justificar la importancia de la autonomía de un banco central, Ramos Francia dijo que se relaciona con tener una inflación baja y estable.

Lo anterior es algo deseable para el buen desempeño de una economía, porque la inflación es uno de los impuestos más regresivos que existen, ponderó.

La inflación afecta más a los que menos tienen porque las personas en los deciles de ingresos más bajos mantienen la mayor parte de su riqueza en billetes y monedas: “Es un impuesto antidemocrático; no es legislado por los congresos”.

Una inflación alta aumenta la incertidumbre en las decisiones de los inversionistas y los ahorradores.

Comentó que los países que otorgaron una mayor independencia a sus bancos centrales obtuvieron un mayor control sobre la inflación.

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