Uno de los principales motores de la economía mexicana, el consumo privado en el mercado interno, se habría debilitado en los últimos meses del año pasado por el alza en las tasas de interés y la persistencia de una alta inflación, revelan datos preliminares del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

Para noviembre de 2022, el Indicador Oportuno del Consumo Privado (IOCP), que anticipa el comportamiento del Indicador del Consumo Privado en el Mercado Interior (IMCPMI), estima una contracción de 0.35% respecto a octubre del mismo año, mientras que, para diciembre, se prevé una disminución mensual de 0.45%, con lo que ligaría dos meses seguidos a la baja.

Además, este retroceso es de llamar la atención si se toma en cuenta la campaña de ofertas comerciales de El Buen Fin, que se llevó a cabo del 18 al 21 de noviembre, así como las fiestas decembrinas y el hecho de que algunas familias contaban con un ingreso adicional como resultado del pago de aguinaldos.

“Esta caída del consumo privado en el mercado interior se debe fundamentalmente a que los hogares han resentido la acumulación de deudas y les hizo destinar ingresos de las gratificaciones de fin de año, aguinaldo y bonos de ahorro a la amortización de deudas, sobre todo ante el incremento de tasas de interés”, explicó Raymundo Tenorio, profesor emérito del Tec de Monterrey.

En su opinión, este comportamiento es un reflejo de los resultados del Indicador de la Confianza del Consumidor que publica el Inegi junto con Banco de México, donde se observa que, por ejemplo, las personas encuestadas no están en condiciones de destinar más recursos para el ahorro, vacaciones y menos para el consumo de electrodomésticos u otros bienes.

“Todo parece indicar que los ingresos de las familias en este fin de año se recompusieron, sobre todo para destinarlo al pago de deuda, y no a ahorro, lo que debilitó el consumo sensiblemente”, agregó el académico.

En segundo lugar, aun cuando la inflación tendió a disminuir después de su máximo nivel en septiembre y octubre pasados, sigue siendo elevada.

“Las familias vieron incrementar los precios de prendas de vestir y bienes personales, así como otros genéricos, lo que trajo como consecuencia que bajaran sensiblemente las ventas de productos como bicicletas, artículos deportivos, equipos de sonido electrónico, etcétera”, afirmó Tenorio.

“Esto se debió a que también los precios en el cierre de diciembre no estuvieron a la baja como fue en noviembre, con la campaña de El Buen Fin.

Para noviembre de 2022, el IOCP estima una variación a tasa anual del IMCPMI de 4.37%, mientras que para diciembre de 2022 se calcula un alza anual de apenas 2.54%, la más baja desde abril de 2021, cuando el indicador inició su recuperación del impacto de la crisis generada por la pandemia de Covid-19.

Para el presente año, el consumo privado en el mercado interno se va a ver afectado por el menor dinamismo de la economía, dijo Tenorio.

El consumo interno se debilitó al cierre de 2022, prevé Inegi
El consumo interno se debilitó al cierre de 2022, prevé Inegi

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