sara.cantera@eluniversal.com.mx

La propuesta de Estados Unidos para aumentar el contenido regional en la fabricación de vehículos en Norteamérica ocasionaría un incremento significativo en el precio de las unidades, indica un estudio del Centro para la Investigación Automotriz (CAR, por siglas en inglés).

El ejercicio considera que la propuesta de EU generaría una disrupción en el mercado, pues por lo menos 46 vehículos no podrían cumplir con la nueva regla de origen ni comercializarse bajo los beneficios del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

Por lo tanto, tendrían que exportarse a EU pagando los aranceles de la cláusula de Nación Más Favorecida de la Organización Mundial de Comercio (OMC).

“La propuesta actual de EU podría resultar en la aplicación de tarifas de Nación Más Favorecida, que representaría el pago de entre 2 mil 100 y 3 mil 800 millones de dólares en impuestos por parte de los consumidores estadounidenses”, detalla el estudio. “Las tarifas incrementarían entre 470 y 2 mil 200 dólares el costo de esos vehículos”, subraya.

Y si las armadoras transfieren el costo de la tarifa arancelaria directamente a los consumidores, se podrían dejar de vender entre 60 mil y 150 mil vehículos al año en EU.

En 2017, esos 46 vehículos que refiere CAR representaron 25% de las ventas de autos en el mercado de EU.

En la discusión actual sobre regla de origen, EU propuso aumentar el contenido regional de los vehículos de 62.5% a 75% en un periodo de tres años; para las partes esenciales como motor y transmisión, el contenido regional subiría a 75%; en otros componentes principales el contenido subiría a 70%; mientras que en las autopartes complementarias sería de 65%.

EU también quiere que por lo menos 70% del acero y aluminio utilizado en la producción de las partes esenciales provenga de alguno de los tres países de Norteamérica.

Asimismo, 30% de los componentes de los vehículos que se fabrican en la región tendrían que venir de un país donde se paguen sueldos de entre 15 y 16 dólares la hora.

Las armadoras podrían obtener un 5% más de contenido regional si se toman en cuenta ciertas inversiones en Investigación y Desarrollo en la región de Norteamérica. Si las armadoras optan por exportar a EU acogiéndose a las reglas de la OMC, tendrían que pagar 2.5% para vehículos ligeros en EU y 6.1% en Canadá.

Efecto contrario. El estudio de CAR destaca que si el costo para las armadoras de modificar la regla de origen es más alto que pagar las tarifas de la OMC, la producción de autos y componentes podría trasladarse a regiones de menor costo. Además, la exportación de vehículos hechos en EU también se afectaría.

“EU exporta 22% de los vehículos que fabrica a sus socios del TLCAN. Incrementar los costos de producción limitaría su habilidad para fabricar vehículos de manera competitiva en el mercado global y eso impactaría de manera negativa el empleo”, indica CAR.

Google News

Noticias según tus intereses