cartera@eluniversal.com.mx

La calificadora Standard and Poor’s dijo que los corporativos en México enfrentarán condiciones de negocio complicadas en caso de que no se logre un acuerdo benéfico en la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN).

“Si Estados Unidos sale del TLCAN y las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC) se convierten en el nuevo marco comercial entre los tres países, esperaríamos condiciones de negocio más débiles en general en México”, dijo la agencia.

En el documento El tiempo apremia: Elecciones y reformas determinarán panorama del sector corporativo latinoamericano de 2018, la firma explicó que para México este año los riesgos se enfocan en el término que tengan las negociaciones del TLCAN y un posible giro al populismo en las elecciones presidenciales.

Según S&P, sectores como el de proveedores de autopartes, bienes durables y bienes raíces están entre aquellos con mayores riesgos ante un posible término del acuerdo comercial, mientras que las industrias con base en materias primas, como la de metales y minería, así como la de petróleo y gas, donde la dinámica de la demanda sigue las tendencias globales, son menos riesgosas.

“Mantenemos como nuestro escenario base que la renegociación del TLCAN dará como resultado un acuerdo en el que prevalezca en gran medida el intercambio transfronterizo y los vínculos de inversión entre Estados Unidos, Canadá y México”, expuso.

Pesimismo. Según la agencia, las estimaciones en el crecimiento del Producto Interno Bruto de América Latina en 2018 no son nada espectaculares.

“A excepción de Argentina y Perú, Brasil, Chile, Colombia y México solamente crecerán entre 2% y 2.5% en 2018. Sin embargo, estos supuestos podrían cambiar, ya que 2018 trae consigo una apretada agenda llena de elecciones y reformas, así como de riesgos geopolíticos internacionales”.

Standard and Poor’s detalló que los potenciales shocks externos como una creciente tasa de interés en Estados Unidos, podrían aumentar los desequilibrios fiscales y provocar recortes más severos al gasto en países como Argentina y Brasil, ya que sus déficits fiscales son sustanciales y podrían en última instancia afectar la calidad crediticia de las corporaciones.

La agencia destacó que la cantidad de emisiones de bonos corporativos fue récord en 2017 y se traducirá en un riesgo de refinanciamiento mínimo durante los siguientes cinco años.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses