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Los bloqueos de las vías férreas en Michoacán y el conflicto laboral en Matamoros podrían disminuir la producción automotriz en enero, consideró la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA).

“Supongo que Matamoros, el combustible de primer llenado y el efecto de Michoacán tendrán alguna afectación en la producción, pero habrá que ver los números al final del mes”, dijo Eduardo Solís, presidente de AMIA.

“Dependemos de las vías de comunicación hacia Lázaro Cárdenas y Manzanillo y, en el caso de Matamoros, dependemos de empresas proveedoras no sólo para México, sino para Canadá y Estados Unidos”.

En Michoacán, la Sección 18 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) lleva 15 días bloqueando las vías del tren.

Armadoras como General Motors, Honda, KIA, Toyota, Mazda y Volkswagen exportan e importan vehículos por el puerto de Lázaro Cárdenas, así como autopartes.

El presidente de AMIA dijo que hay 14 mil vehículos nuevos varados en los vagones del tren.

Del conflicto laboral en Matamoros, Solís advirtió que muchas empresas que accedieron aumentar sueldos podrían cerrar operaciones en los próximos meses, pues el incremento se hizo desde una interpretación errónea del decreto que aumentó el Salario Mínimo en la zona fronteriza.

“Hay empresas que por la urgencia, por la necesidad, por la importancia de no cerrar están firmando, pero repensarán su permanencia en Matamoros. Son de esas cosas que ganas, pero pierdes”, dijo Solís durante el foro Automotive Logistics Mexico.

El conflicto laboral radica en una cláusula de un contrato laboral acordada en los años 70, la cual otorga un incremento de 100% adicional a lo que suba el salario mínimo en Matamoros, más otro tanto en un bono en efectivo, pero sólo para trabajadores que ganen un salario mínimo.

Por lo tanto, no aplica para empresas que pagan sueldos arriba de un salario mínimo.

En Matamoros opera Autoliv, el fabricante de volantes más grande del mundo, con 4 mil 350 trabajadores.

Acero. La Cámara Nacional del Hierro y del Acero (Canacero) contabilizó daños superiores a mil 400 millones de pesos para siderúrgicas, por la detención de 500 carros de ferrocarril.

Los contenedores tienen 154 mil toneladas de mineral de hierro, 100 mil toneladas de chatarra y 23 mil toneladas de productos semiterminados y terminados, así como insumos para la fabricación de acero mexicano.

De continuar el bloqueo, algunas plantas siderúrgicas entrarán en paro técnico, hecho que afectará a industrias automotriz, línea blanca, metalmecánica y construcción.

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