politica@eluniversal.com.mx
Uno de los sobrevivientes mexicanos del tráiler de Texas es menor de edad. Se trata de Brandon Rodrigo Martínez de Loera, de 16 años de edad, quien permanece en coma y tiene comprometidos los riñones, los pulmones y el cerebro.
Aunque los dos primeros órganos están respondiendo satisfactoriamente, los médicos tienen un pronóstico reservado sobre el cerebro.
“No saben si va a estar normal cuando despierte”, dijo a EL UNIVERSAL José de Jesús Martínez, padre de Brandon. “Estoy muy triste, desesperado; yo no sabía que venía en ese camión hasta después que pasó lo que pasó y me enteré porque me avisaron”, continuó con la voz angustiada.
El abogado especialista en inmigración Alex Gálvez, con sede en Los Angeles, California, se movilizó a Denver, Colorado, al saber del padre de Brandon; se ofreció a llevarlo a San Antonio y acompañarlo para defenderlo y apoyarlo, en caso de que agentes federales hicieran acto de presencia y quisieran hacer detenciones en el hospital.
“Y sucedió”, cuenta alterado el abogado. “Había agentes federales en el hospital que querían hablar con el padre de Brandon y tuvimos que hacer un recuento muy preciso de las leyes y de la calidad humana de los Estados Unidos en situaciones como esta”, contó.
“Afortunadamente se retiraron y dijeron que van a respetar el dolor de las víctimas hospitalizadas y sus familiares”. Gálvez les recordó a los agentes, entre otras cosas, que “estas personas pueden, por esto que les pasó, aspirar a una Visa ‘U’ para quedarse legalmente en Estados Unidos; ya que fueron víctimas de violencia”.
Brandon, a su corta edad, es papá. En El Llano, dejó un bebé de apenas dos meses de edad. “Se vino para tratar de mejorar y hacer un poco de dinero, yo creo que él se quiere regresar más adelante, su hijo está muy chiquito y pues ni modo que se lo traiga así” dijo don Jesús. Ante la realidad, añadió, “lo que sigue es que despierte, que comprobemos que está bien”.