La sesión del consejo general del Instituto Nacional Electoral tuvo que detenerse el viernes por falta de quórum, pues algunos de los representantes de los partidos políticos se ausentaron o se escaparon deliberadamente.


Nos comentan que un detalle llamó la atención: uno de los primeros en retirarse fue el representante del PT, partido que precisamente ha peleado su regreso a esa mesa de discusión y que se aferra a su registro y los millones de recursos públicos para su gasto.


A punto de perder el registro, como resultado de la elección del 7 de junio, en que no alcanzó el mínimo requerido de votación de 3% y salvados momentáneamente por un error de procedimiento detectado por el  Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, los petistas aplicaron la de "viernes y en quincena", mientras se toma la ruta correcta de su extinción.


Sencillamente, pusieron pies en polvorosa.


Los petistas apuestan a conseguir oxígeno extra y utilizan las mañas del pasado: alargar los tiempos, nos comentan.

cg

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