El jefe del gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, llamó a que tras las elecciones del 26 de junio se pueda formar un “gobierno con estabilidad” que mantenga las políticas económicas que impulse el empleo en España.


En una visita a una cervecera local, el mandatario en funciones expuso que esos objetivos son esenciales en la búsqueda del apoyo parlamentario que necesita para formar gobierno, para lo que al menos necesita “un acuerdo al menos de mínimos” con otros grupos políticos.


Rajoy al frente del Partido Popular (PP) ganó las elecciones sin mayoría, al haber conseguido 137 de los 350 escaños en el Congreso de los Diputados, y para reelegirse necesita el voto de 176 (la mitad más uno de mayoría absoluta) que busca de otras formaciones.


El mandatario realiza los contactos de forma discreta, sin hacerse pública una agenda de llamadas y entrevistas, y solo se conoce que este martes se reunirá con un interlocutor de Coalición Canaria (CC) que tiene un escaño en la cámara.


Sin embargo, hasta ahora poco interés se ha manifestado en apoyar una votación de investidura presidencial, y algunas formaciones políticas fijarían su posición hasta después de que se constituya la legislatura el 19 de julio.


El presidente del País Vasco (lehendakari), Iñigo Urkullu, expresó este lunes su voluntad de negociar con Rajoy los apoyos de los cinco diputado del Partido Nacionalista Vasco, a cambio de desplegar una agenda de medidas económicas y políticas que reclama su comunidad.


La segunda fuerza política, el Partido Socialista Obrero Español (PSOE) obtuvo 85 escaños, y apenas el sábado próximo se reúne su comité federal, y son pocas las voces que se animan a expresar apoyo a la investidura de Rajoy.


Su dirigente Pedro Sánchez sostendrá entrevistas con los líderes territoriales para conocer su posición y saber cómo va a procederse ante la llamada del mandatario.


La centroderecha Ciudadanos, con 32 escaños, se ha decantado por esperar a que sea Rajoy quien mueva ficha, y su deseo es que el PSOE apoye al menos con una abstención de voto, la investidura.


La tercera fuerza política, la coalición Unidos Podemos (Podemos e Izquierda Unida) que consiguió 71 escaños, realiza actualmente un debate interno sobre su futuro después de que su resultado electoral no fuera el esperado, y votará contra Rajoy.


En tanto, Rajoy insistió este lunes que es por la necesidad de asegurar la recuperación económica tras años de recesión por la que quiere mantener sus políticas, y llegar al año 2020 con su promesa de creación de puestos de trabajo.


“Si hay un gobierno que tenga estabilidad, si hay un gobierno que pueda gobernar, generaremos confianza y con la ayuda de los emprendedores conseguiremos ese gran objetivo nacional de los dos millones de empleo”, dijo.


Abundó que está dispuesto a que se “aparquen las discrepancias” y se conforme todo lo que les une para asegurar la estabilidad del gobierno.


jlcg

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