Bruselas.— En su afán por contener la avalancha de refugiados, la Unión Europea cerró un acuerdo con los Balcanes para que se ocupen de los desplazados sirios que cruzan la región camino al resto de Europa.
El pacto consiste en ayuda financiera y técnica a Serbia, Macedonia y Albania para que controlen mejor sus fronteras, acojan a los que lleguen y registren a los candidatos a recibir asilo en la Europa rica.
Además acordaron ampliar las capacidades de recepción migratoria para 100 mil personas a lo largo de la ruta de los Balcanes, 50 mil lugares serán creados en Grecia. También se decidió que a Eslovenia, que está recibiendo una avalancha de inmigrantes sin precedentes, llegarán en el transcurso de una semana más de 400 policías adicionales para vigilar sus fronteras,
“Es un importante paso hacia una gestión más ordenada de la situación y también en la repartición de la carga al interior de la UE”, destacó la canciller alemana Angela Merkel. La cumbre, en formato “mini”, contó sólo con la presencia de los jefes de Estado de los ocho países comunitarios afectados directamente por el éxodo que cruza la ruta de los Balcanes (Austria, Bulgaria, Croacia, Alemania, Grecia, Hungría, Rumanía y Eslovenia), y los países no comunitarios clave para cerrar la circulación por esa vía.
Convocada con carácter de urgencia por el presidente de la Comisión Europea, Jean Claude Juncker, fue la segunda ministerial celebrada en Bruselas en menos de dos semanas y la quinta en lo que va del año para atender la crisis migratoria.
A diferencia de los encuentros previos, éste tuvo como novedad la participación del Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados, António Guterres, quien relanzó el mensaje a favor de actuar de manera coordinada ante el “movimiento caótico que tiene lugar en los Balcanes”.
Las pláticas se intensifican al interior de la UE ante la inminente llegada del invierno y proliferación de alertas emitidas por instancias como la Cruz Roja, las cuales advierten sobre una eventual tragedia humanitaria de no adoptar medidas preventivas.
“En la actualidad estamos llegando por las noches cerca del punto de congelación en los Balcanes. Dentro de un mes pegará el invierno. Las temperaturas podrían descender 20 grados bajo cero”, alertó Caroline Haga, de la Federación de la Cruz Roja Internacional.
El flujo de refugiados no detiene su marcha. La Organización Mundial para las Migraciones informó el viernes que pese al deterioro de las condiciones climáticas 48 mil personas llegaron a Grecia en un periodo de cinco días, lo que marcó un nuevo record en arribos.
En tanto, al menos tres personas, una mujer y dos niños, murieron ayer y otras 12 están desaparecidas tras el naufragio de una embarcación en la zona marítima de la isla griega de Lesbos, situada en el mar Egeo, a pocos kilómetros de Turquía.
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