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La Contraloría General capitalina tiene abiertos dos procesos administrativos en contra del jefe delegacional en Tláhuac, Rigoberto Salgado, por su presunta relación con la organización delictiva que encabezaba Felipe de Jesús Pérez Luna, El Ojos.

Ambas indagatorias tienen que ver con el registro de los familiares y amigos del líder de un grupo delictivo de Tláhuac en la nómina de la delegación, así como los nexos que pudiera tener Rigoberto Salgado con él.

En su edición impresa de ayer, EL UNIVERSAL reveló que de acuerdo con trabajos de inteligencia han identificado a cinco personas cercanas o familiares de El Ojos en la nómina de dicha demarcación; cuatro de ellos aún laboran ahí.

Sin abundar en los detalles, el jefe de Gobierno, Miguel Ángel Mancera, dijo que son “varias las líneas de investigación” que desde la Contraloría se tienen, para comprobar si es que existe vínculo entre Rigoberto Salgado y la organización de El Ojos.

Según las primeras indagatorias, Betuel Beltrán Vázquez, jefe de Unidad de Agua Potable; Lucy Beltrán Vázquez, analista y auxiliar de Servicios Generales; Cristhian Salgado Pérez, quien fue coordinador de proyectos en la Dirección General de Desarrollo Ecológico y Rural; Griselda Cortés Gutiérrez, quien se desempeñó como jefa de Unidad de Departamento del Centro de Servicios y Atención a la Ciudadanía, y Arisele Cortés Gutiérrez, subjefa de oficina del Centro de Servicios y Atención a la Ciudadanía, tienen algún vinculo familiar o de amistad con Felipe de Jesús Pérez.

En entrevista en el Antiguo Palacio del Ayuntamiento, Mancera afirmó que los operativos en Tláhuac se mantendrán hasta que se cumplan los objetivos que en materia de seguridad se tienen programados.

Sobre la posible renuncia de Rigoberto Salgado, dijo que esas son “consideraciones personales”.

Diputados piden cuentas. La Asamblea Legislativa no se convertirá en Ministerio Público del delegado en Tláhuac, Rigoberto Salgado, aunque éste tendrá que explicar públicamente la presencia de familiares de El Ojos en la nómina de la demarcación.

En esto coincidieron el presidente de la Comisión de Administración y Procuración de Justicia, Israel Betanzos (PRI), y el líder de la bancada del PAN, Jorge Romero, al asegurar que el tema de inseguridad en la delegación Tláhuac no será politizado.

Romero sostuvo que este miércoles cuando comparezca el delegado de Tláhuac la posición de Acción Nacional será escuchar lo que tenga que decir el jefe delegacional.

En tanto, el priísta Israel Betanzos se dijo respetuoso de las investigaciones que realizan las autoridades correspondientes y aclaró que serán éstas las que resolverán a favor o en contra de Salgado: “No somos Ministerio Público, pero en representación de la ciudadanía estaremos preguntando sobre las inquietudes que todos tenemos sobre el delegado”.

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