Abaten en Tlalpan el rezago educativo

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En la delegación Tlalpan hay 35 mil personas que, por diversas razones, abandonaron sus estudios y no concluyeron su educación básica; de las cuales, poco más de 5 mil jóvenes y adultos encontraron una opción para concluirlos de forma gratuita, a través de las llamadas ciberescuelas.

María Esther Zacarías, de 18 años, retomó la preparatoria desde febrero pasado en un centro de este tipo, en el Centro Histórico de la demarcación, donde avanza a su ritmo a través de las plataformas de estudio por internet que dispone la escuela.

“Si tengo una duda, le pregunto a mi tutor o ellos me apoyan”, comenta la joven, quien el año anterior reprobó algunas materias y tuvo problemas administrativos para continuar sus estudios en un Colegio de Bachilleres; pero luego se enteró de esta opción gracias a una vecina.

“Me gustaría continuar mis estudios, porque papelito habla y, con esto, podría tener un puesto laboral, pero quiero seguir”, añade la habitante de la colonia San Lorenzo Huipulco.

En la actualidad, se han abierto 19 ciberescuelas, que atienden a 5 mil 218 estudiantes; la delegación planea llegar a 26 centros y apoyar a 7 mil personas para que concluyan la primaria, secundaria o preparatoria.

Beatriz Margarita Erosa, de 53 años, también estudia desde abril la preparatoria abierta en la ciberescuela del Centro de Tlalpan, porque quiere ser maestra.

La vecina de la colonia San Pedro Apóstol se animó a estudiar por la falta de trabajo; aunque ha sido secretaria y educadora de personas con discapacidad, ahora requiere este grado de estudios para seguir laborando.

“He descubierto que quiero ser maestra en algún nivel, kínder, primaria, porque siempre me ha gustado la enseñanza”, dice Beatriz, quien estudia los martes y jueves.

“Estos son centros de educación a distancia, pero con docentes que hacen de esto una educación personalizada”, aseguró la jefa delegacional Claudia Shienbaum, quien sostuvo que no hay un programa con esas mismas características en la capital y que el objetivo es garantizar el derecho a la educación.

Añadió que también es atractiva la opción de las ciberescuelas porque hay casos de quienes hacen el examen de Comipems para acceder al bachillerato y les asignan planteles muy lejanos, por lo que la distancia y costos imposibilitan su educación.

El programa lleva un año cuatro meses y se han invertido 32 millones de pesos: 20 millones han sido para habilitar los espacios y comprar computadoras, y los 12 millones restantes son para los costos operativos.

Con esta última cifra se da un apoyo económico a los 280 docentes que auxilian a los usuarios, que son jóvenes con licenciatura y que aquí encuentran un empleo.

“Ayudamos a los alumnos a reforzar sus conocimientos para exámenes de acreditación de un nivel de estudios, pero también hay otras actividades como cine debates, ajedrez”, comentó Rogelio Estrada, auxiliar en la ciberescuela del Centro de Tlalpan.

Los espacios se ubican en las colonias con mayores niveles de marginación y funcionan con las plataformas de estudio a distancia de la SEP y una del gobierno capitalino.

El principal servicio que se brinda es la acreditación de estudios de nivel medio superior con 54%; seguido de secundaria, 18%, y primaria, 10%.