La céntrica calle de Gante es una de las pocas que ha conservado su nombre a lo largo del tiempo y ya figuraba como tal en planos antiguos de la capital.
La calle de Gante debe su nombre a Fray Pedro van der Moere, mejor conocido como Pedro de Gante que llegó a México en 1523.
Gante es una de las pocas que ha conservado su nombre a lo largo del tiempo y ya figuraba como tal en planos antiguos de la capital.
Es también una de las primeras en transformarse en peatonal, al formar parte del programa de remodelación urbana del Centro Histórico a inicios de los años setenta.
Durante la remodelación de esta importante vía el asfalto fue sustituido por adoquín y se instalaron numerosas jardineras y farolas a todo lo largo de la calle en la que convergen varios restaurantes.