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Taxistas de la organización “Huichil”, realizaron una protesta en la calzada de Tlalpan contra las modificaciones al Programa Hoy No Circula, el cual los ha llegado a perjudicar, pues dicen, han dejado de trabajar.
Los conductores acusaron que las autoridades capitalinas han apoyado en mayor medida a Uber, en lugar de protegerlos a ellos quienes tienen años trabajando en el sector y además de que, aseguran, pagan sus impuestos.
Los taxistas quienes además están en contra de los operativos de verificación que realiza la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), se concentraron en el Metro General Anaya, obstruyeron por algunos minutos la circulación vehicular y después se trasladaron hacia el centro de la capital.
Cerca de las 9:30 de la mañana, alrededor de 200 taxistas a bordo de 80 unidades se detuvieron en el cruce de Diagonal 20 de Noviembre y Calzada San Antonio Abad, en la colonia Centro, pues los accesos al primer cuadro de la ciudad eran resguardados por policías de tránsito.
Con pancartas en mano, los taxistas descendieron de sus unidades para exigir: “Queremos circular todos los días, los afectados son las familias”
Tras impedirles el paso, los manifestantes amenazaron con permanecer por horas en la vialidad, obstruyendo la calzada San Antonio Abad:
“¡Nos nos vamos a quitar, queremos trabajar!”, “¡Queremos solución!”.
Entre las calles Tlaxcoaque y 20 de Noviembre, los ánimos se calentaron. Ruleteros contra uniformados comenzaron una riña. Hubo empujones, golpes y detenidos, algunos de éstos tuvieron que ser llevados en brazos, pues no desistían de las agresiones.
De acuerdo con la Secretaría de Seguridad Pública de la Ciudad de México, siete personas fueron detenidas tras la riña entre taxista y uniformados. Los manifestantes acusaron a la SSP de llevar cuatro de sus vehículos al corralón, pero este hecho no se confirmó.
Minutos más tarde se presentaron aproximadamente 66 elementos del Agrupamiento de Granaderos, que controlaron la situación y resguardaron la zona para que no pudieran ingresar hacia la plancha del Zócalo.
El Gobierno de la Ciudad de México envió a personal de Concertación Política para negociar con los manifestantes y acordaron liberar a los detenidos, además de iniciar una mesa de trabajo con distintas dependencias.
Se formó una comisión de 10 personas e ingresaron a una reunión con autoridades de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema), de la Subsecretaría de Tránsito y de la Secretaría de Movilidad (Semovi). En punto de las 10:00 horas la vialidad fue liberada.
Piden inclusión. Motociclistas exigieron a Tanya Müller, titular de la Sedema, tome en cuenta sus opiniones antes de querer normar la obligatoriedad de la verificación para este medio de transporte.
Alberto Ignacio Carrillo, del Club de Motociclistas, aseguró que imponer la verificación a las motos se trata de una nueva ocurrencia de la funcionaria local con la finalidad de recaudar más dinero y fomentar la corrupción.
En representación de 85 motoclubes, Carrillo manifestó la inconformidad no sólo por la entrada del nuevo Reglamento de Tránsito, sino ahora con la verificación y aseguró que la motocicleta no es un problema sino una solución al tránsito e incluso en materia de estacionamiento.
César Cravito, líder de Morena en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, solicitó a la Sedema explique con qué máquinas se verificarán las motos, si se comprarán nuevos equipos, si habrá verificentros especiales y cuáles serán las normas para determinar si una moto cumple o no.
“Parece que es una ocurrencia más de la secretaria sin tener algo desarrollado”, comentó Cravioto.
Pidió a la funcionaria local que si no puede con el cargo se haga a un lado y que mejor le deje el lugar a una persona más capacitada.
