Sara Daniela, de 12 años, tuvo que dejar la Escuela Secundaria Técnica 17, en donde sus compañeros intentaron envenenarla con insecticida agrícola que colocaron al Yakult que desayunaba.

Hace 15 días, la niña ingresó de nuevo al hospital comunitario con un dolor en el estómago y afectación emocional. Según el diagnóstico médico, son secuelas de la intoxicación por el veneno que “las chiquillas” pusieron en su bebida el 1 de febrero pasado, informó Beatriz Adriana Sánchez Salinas, tía de la menor.

Después de salir del hospital, la niña retomó sus clases en el grupo de primer grado de la Secundaria de la comunidad de San Pedro, a 20 minutos de distancia de su domicilio.

La mujer señaló que en la Secundaria Técnica 17, ubicada en San Nicolás de los Agustinos, el director Ismael Flores Rodríguez, el maestro de Agricultura Pedro Cerritos Ortiz y las alumnas que agredieron a su sobrina siguen en el plantel “como si nada hubiera pasado”.

Verónica Sánchez, madre de Sara Daniela, había solicitado a las autoridades educativas que las alumnas salieran de la escuela para que su hija regresara, por ser ella la víctima, pero ante la falta de respuesta decidió inscribirla en otro plantel.

Sánchez Salinas afirmó que las autoridades han hecho poco por la violencia escolar que sufrió y le ocasionó problemas de salud y afectación sicológica. “¡No se ha hecho justicia!”, exclamó. Explicó que por más de un mes, en la delegación sureste de la Secretaría de Educación de Guanajuato (SEG) y en el Ministerio Público a la madre de Sara la “traían de arriba para abajo”; a la fecha no han resuelto nada.

Maestros impugnan sanción. El departamento de la Consejería Jurídica de la SEG determinó la suspensión laboral de ocho días, sin goce de sueldo y dos malas notas en su expediente personal en contra de los profesores Ismael Flores Rodríguez y Pedro Cerritos Ortiz, por los hechos en los que resulto afectada Sara.

La dependencia informó que el 3 de marzo concluyó el procedimiento de investigación disciplinario laboral y se notificó la sanción a los docentes. Tanto el director como el maestro de Agricultura impugnaron el resultado, por lo que el proceso sigue.

El profesor de la clase de Agricultura tenía bajo su cargo los materiales que se utilizan para impartir la materia, como los fertilizantes. La delegación sureste de la SEG informó que la alumna se encuentra fuera de peligro y actualmente recibe apoyo sicológico, asimismo, “por petición de los padres” se le incorporara al mismo centro educativo a la brevedad para recibir apoyo pedagógico.

El Ministerio Público local continúa el proceso de investigación y ofreció ayuda sicológica a los menores involucrados.

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