Ante el llamado “gasolinazo”, que aumentará hasta 20% el costo de la gasolina en México, el Sindicato de Choferes, Taxistas y Similares del Caribe “Andrés Quintana Roo”, anunció que contempla solicitar al gobierno del estado autorizar el aumento de la tarifa.

El organismo sindical expresó este sábado su “enérgico rechazo” ante el incremento en el precio de la gasolina, debido a que impactará la economía de miles de familias de operadores de taxi, como de propietarios de los vehículos de alquiler.

El secretario general del gremio, Eric Castillo Alonzo, informó que analizan la posibilidad de solicitar al gobierno encabezado por Carlos Joaquín el ajuste de la tarifa, es decir, un aumento, cuyo monto no especificó.

Mediante un comunicado de prensa, indicó que desde noviembre de 2014 se autorizó el último incremento en el servicio, pero con el incremento del precio del combustible, se requerirá hacer un ajuste, pues implica “un severo golpe al poder adquisitivo de los trabajadores del volante, porque no sólo merma la ganancia de la jornada diaria, sino que también se refleja en la compra de aditivos, llantas y otros insumos derivados del petróleo, indispensables para este rubro del transporte”.

Otro de los argumentos esgrimidos por el sindicato estriba en que, con excepción del municipio de José María Morelos, en la zona sur del estado, Quintana Roo tendrá la gasolina más cara del sureste, en comparación con el precio que tendrá el combustible en Campeche y Yucatán, de acuerdo con el listado de precios máximos al público que dio a conocer la Comisión Reguladora de Energía.

“De hecho con el 20 por ciento a los combustibles que anunció este martes (sic) la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, la gasolina Magna incrementaría 1.92 pesos y quedaría con un precio de 15.90 pesos, mientras que la Premium aumentará en 2.86 pesos y estaría a 17.67 pesos en su precio máximo al público”, resaltó.

Si bien Castillo menciona que desde hace más de un año se han abstenido de solicitar un aumento en las tarifas de taxi ante el incesante incremento de la gasolina, omitió admitir que los operadores cobran a discreción la tarifa que les acomoda, al menos en sitios como Cancún.

Aunque el monto base o mínimo es de 28 pesos, los taxistas suelen cobrar 30 pesos, pretextando que no poseen cambio. A partir de ese monto, cobran por trayectos que cuestan 30 pesos, 35 pesos y así sucesivamente. En temporada vacacional, aumentan ilegalmente sus tarifas entre 15 y 20 pesos, como “apoyo” a falta de aguinaldo y durante las noches, han llegado a cobrar hasta 30 pesos más.

Las y los pasajeros se encuentran permanentemente en la indefensión, debido a que, pese a que es una obligación del operador cargar con un tarifario oficial, algunos no lo exhiben, otros no lo llevan consigo y algunos más lo alteran; las líneas de atención del Sindicato, para quejas y denuncias, no siempre están disponibles o se obliga al usuario a acudir hasta las oficinas del organismo para meter el reporte, que además de ser tardado, suele ser inútil porque las sanciones son mínimas y no se informa al ciudadano si procedió o no.

El líder sindical añadió que respaldan la petición de asociaciones ciudadanas y del sector empresarial que solicitan al gobierno federal la eliminación del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS), aplicado a la producción y/o venta o importación de gasolinas, alcoholes, cerveza y tabacos.

Días atrás, las empresas de transporte urbano, Turicun y Autocar, comunicaron la intención de aumentar también sus tarifas. El incremento planteado es de dos pesos, respecto a los 8.50 que se paga por el servicio de autobús en la ciudad y de 10.50 en la zona hotelera.

ml

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