El gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, llamó al diálogo a todos los sectores sociales para la búsqueda de soluciones de las demandas y temas estatales, pero advirtió que quienes apoyen a “organizaciones y personas radicales” serán sujetos a la acción legal.

Aseguró que en su gobierno las puertas se mantienen “abiertas para dialogar; siempre haré un llamado a la sociedad, a la Iglesia, a legisladores locales y federales, también a los maestros, medios de comunicación… que siempre resolvamos nuestras diferencias por la vía del diálogo”.

“Debemos pugnar por el respeto y la tolerancia para que triunfe el discurso de 'la unidad y la paz' por encima del odio y la división”, planteó.

Enfatizó su repudió a la agresión a maestros en Comitán de Domínguez. Como autoridad “condenamos esos actos vejatorios y de humillación a manos de delincuentes, que no les importó que entre las víctimas hubiera mujeres de la tercera edad”.

Ninguna circunstancia, “nada justifica esos actos de barbarie” porque lo único que hacían los maestros era cumplir con su trabajo con convicción y legalidad, dijo.

Velasco Coello afirmó que los agresores recibirán toda la firmeza de la ley, como ahora sucede con Santiago López Calvo, quien es señalado por las víctimas como el responsable de encabezar la agresión y a quien la Procuraduría General de Justicia del Estado le imputó delitos que no alcanzan libertad bajo fianza, subrayó.

Agregó que los operativos de búsqueda son permanentes, para que el resto de los agresores “paguen con cárcel las agresiones y humillaciones” cometidas.

Velasco Coello lanzó un “¡ya basta!” a ese tipo de atropello de “personas radicales que actúan sin principios y desprecian la dignidad humana”.

La Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) confirmó el arresto de Santiago Calvo López y/o Santiago López Calvo, por su presunta participación en los hechos contra los docentes.

Así como los cargos por atentados contra la paz y la integridad corporal, por los cuales ingresará al centro penitenciario El Amate del municipio de Cintalapa de Figueroa.

De acuerdo con las indagatorias, el indiciado encabezó y privó de la libertad a los seis profesores que fueron sacados violentamente de un inmueble.

En la acción fue acompañado de unos 80 agremiados de la Organización Popular Independiente Emiliano Zapata (OPIEZ), integrada principalmente por comerciantes ambulantes.

spb

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