El senador Sofío Ramírez realizó una denuncia de hechos por la agresión que sufrió la madrugada de este martes 31 de mayo en el municipio de Teziutlán en el estado de Puebla.

En entrevista con EL UNIVERSAL, el legislador relata que tras realizar un recorrido por varios municipios -como parte de la campaña para favorecer a Blanca Alcalá, candidata a la gubernatura de Puebla-  fue perseguido por patrullas municipales, quienes intentaron romper la caravana que resguardaba al priísta.

Posteriormente al lugar arribaron cuatro camionetas con alrededor de 40 sujetos encapuchados, armados con palos y garrotes, que cercaron al legislador y a sus acompañantes. Sofío Ramírez narra que logró llegar al hotel donde se hospedó sin sufrir daño físico.

Pero presenció como las camionetas que lo seguía pasaron a un lado del hotel “a vuelta de rueda con una actitud intimidatoria, provocativa”.

“La denuncia es que la policía municipal nunca intervino, por el contrario al parecer hizo tiempo para que los encapuchados llegaran”, asegura el senador.

La mañana de este martes, Sofío Ramírez denunció el hecho con el presidente municipal Antonio Vázquez Hernández, argumentando que “queda muy clara la complicidad de sus policías con el grupo de choque”.

Por su parte, el edil aseguró que investigaría el caso.

Al salir del palacio municipal, Ramírez,  acompañado del secretario general del ayuntamiento descubrió que la camioneta que lo persiguió estaba en el estacionamiento del mismo ayuntamiento.

“Cuando los muchachos que me acompañaban empezaron a identificarla, delante del secretario, los ocupantes que estaban en la banqueta se subieron corriendo a la camioneta, huyendo de que nosotros los señaláramos”, relató.

Ante el hecho, el senador dijo: “pedimos el auxilio de la policía y nadie intervino”. Con lo que “queda demostrado que la camioneta era una de las involucradas en la agresión”, asegura el agredido.

Por voluntad propia, el senador presentó una denuncia de hechos donde asegura “responsabilizo al gobernador Rafael Moreno Valle de la integridad física de mi persona y compañeros, y de su intromisión en este proceso electoral”.

También al presidente municipal Antonio Vázquez, “porque son sus trabajadores, son sus policías y también pediremos que se cite a comparecer al secretario general del ayuntamiento”.

El ex perredista denuncia por “omisión y obstrucción de la justicia”, pues asegura que aunque el propio secretario se dio cuenta no hizo nada para detener a los sospechosos.

“Fue clara la complicidad y sincronización de hechos y prueba de ello es que hoy en el ayuntamiento descubrimos que una de las camionetas estaba precisamente estacionada en el ayuntamiento, tiene el logotipo del ayuntamiento y cuando mis compañeros la reconocieron, sus ocupantes salieron huyendo y esperaron a que nosotros pudiéramos entrevistarlos”.

El legislador califica como una campaña de miedo que el gobernador ha sembrado en el estado, de “hostigar, amenazar, intimidar”, dice y enfatiza que “es una muy clara intromisión de su gobierno para favorecer a su candidato”.

Parece ser una estrategia para que la ciudadanía no salga a votar en favor de Blanca Alcalá, concluyó.

jram/ml

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