Bellas Artes a revisión profunda

El incendio ocurrido en el área norponiente del Palacio de Bellas Artes, dijo la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes, Lidia Camacho, se debió a un “corto circuito” en uno de los talleres, pero, insistió, hay que esperar los resultados del dictamen de la Procuraduría General de Justicia de la Ciudad de México para determinar a cabalidad el origen. Mientras tanto, advirtió que aunque en el recinto existe un programa permanente de mantenimiento, se hará un registro “muy detallado” para “revisar a profundidad” si existe otro espacio que pudiese generar “un problema”. ¡Menos mal! En tanto, las áreas afectadas permanecen tal cual en lo que acaban de hacer el dictamen que, nos dicen, es tardadito, alrededor de un mes. Los resultados, se prevé, serán dados a conocer a finales de julio. Ya veremos.


Confusión en el gobierno de Morelos

A principios de este mes, el gobernador de Morelos, Graco Ramírez, anunció la construcción de un Museo del Chinelo en el municipio de Yautepec. El proyecto, que también contempla la remodelación del centro histórico, tendría una inversión de 16 millones de pesos. Nos cuentan que promotores culturales de ese pueblo celebran que las autoridades tengan interés de difundir esta tradición que, por cierto, recientemente fue declarada patrimonio cultural inmaterial de esa entidad, pero también les hacen ver que quizá se les olvidó un pequeño detalle: en ese pueblo ya hay un Museo del Chinelo. El proyecto, han relatado en algunos foros, es una iniciativa que surgió de la propia comunidad hace unos años y se trata de un espacio que exhibe unos 400 objetos, donados por los habitantes, entre material fotográfico y vestuarios característicos, que dan cuenta de la historia del carnaval en esa región. El problema, dicen los promotores, no es el proyecto de construcción de un nuevo museo ni la inversión, sino que se pretendan colocar medallas por su apoyo a la cultura y que no reconozcan esta valiosa iniciativa ciudadana.

¿Festival Guanajuatense Cervantino?

El Festival Internacional Cervantino inicia su nueva etapa con algunos cuestionamientos. Uno de ellos es la amplia oferta local que representa 43% de la programación global. Los organizadores explicaron que este porcentaje se debió a que hubo una amplia respuesta a la convocatoria. Y pues está muy bien que haya muchos artistas guanajuatenses, pero ¿todos serán de “altísimo nivel” como según se exige?, ¿no debe privilegiarse la programación internacional? Nos dicen que esta edición no es particularmente atractiva y que la gente se pregunta si no saben buscar o es que este año no hay algo que motive a ir a la fiesta del espíritu. Y otros aseguran que hay información incompleta, por ejemplo, prácticamente nada se sabe de OM21, uno de los programas más atractivos que dejó Jorge Volpi y que busca fomentar la ópera mexicana; y hay otros anuncios, como “La música guiando al pueblo. Recital entre México y Francia”. ¿Y eso qué es? Pues quién sabe.


Editores españoles tiene un respiro

Aunque aún no saltan de gusto, los editores españoles comienzan a sonreír con cautela y nos cuentan que no es para menos, pues parece ser que ya comienzan a remontar la crisis tan dura de los años anteriores y según los datos reportados ayer, su línea de crecimiento es evidente respecto a 2014. La facturación de las editoriales españolas se incrementó 2.7%, porcentaje de crecimiento similar al registrado en 2015 (2.8%), y alcanzó los 2 millones 317 mil 20 euros. Sin embargo, los editores son cautelosos y saben que aún les queda recorrido para alcanzar las cifras que obtuvieron en los años anteriores a la crisis económica. Parece que es un mercado distante al mexicano, pero no es así, porque los editores españoles sobrellevaron la crisis económica gracias a sus exportaciones hacia América Latina, y México a la cabeza, tan sólo el año pasado alcanzaron 571 millones 77 mil euros, que representó un incremento de 3.5%.

Google News

TEMAS RELACIONADOS

Noticias según tus intereses