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Ellos desean retirarse antes de cumplir 65 años, pero no están conscientes de que el ahorro —el único instrumento que tienen para tener un buen retiro— es el que les va ayudar para mejorar esta etapa.

Los jóvenes mexicanos que tienen hoy entre 20 y 30 años ven al ahorro más bien como una herramienta a corto plazo, que les ayudará para enfrentar una emergencia o adquirir un bien inmueble. Pero del retiro, sólo están más conscientes, aunque no están tomando acciones concretas.

Éste es uno de los resultados del sondeo “¿Qué piensan los Millennials mexicanos del ahorro para el retiro?”, realizada por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro, la cual encuestó a más de 2 mil jóvenes en este rango de edad y encontró que sólo uno de cada cinco ubica al ahorro como un mecanismo para mejorar su retiro. Más de la mitad (52%) está motivado a ahorrar más bien para enfrentar una emergencia, comprar una propiedad (25%) o incluso para poner un negocio (22%).

Lo que sí es que esta generación tiene más conocimiento que la anterior sobre estos temas.

Sabe qué es una Afore, cuatro de cada cinco consideran muy importante el contar con la posibilidad de jubilarse y recibir una pensión y sobre todo, “parece intuir que las tasas de reemplazo proyectadas (30% de su sueldo actual) no serán suficientes para mantenerse en la vejez”, sostiene el estudio.

Ellos están más conscientes, pero eso no significa que estén llevando a cabo realmente algo.

“Si bien existe interés por parte de los millennials para jubilarse, su previsión del futuro no se ve reflejada en acciones concretas y se queda en el discurso”, sostiene una de las conclusiones de este análisis.

Quizá uno de los datos más preocupantes que arroja este estudio es que 64% no acostumbra llevar algún tipo de registro de sus ingresos y gastos mensuales. De los que sí lo llevan (35%), 62% es mayor de 25 años. Los más grandes de esta generación son los que realmente llevan la contabilidad de lo que gastan.

Un hallazgo importante de este ejercicio es que los jóvenes tienen aspiraciones emprendedoras.

El tercer motivador para ahorrar, de acuerdo con el sondeo de la comisión, es el poner un negocio y es la segunda opción de destino para invertir una hipotética buena cantidad de dinero que pudiera llegarles inesperadamente.

El primer destino sería el ahorro. Además, casi a la mitad (49%) le gustaría trabajar por su cuenta más que hacerlo para una empresa y cotizar en el IMSS o en el ISSSTE (48%).

Este ejercicio es el primero que se enfoca en esta población y es importante porque de la generación Afore —la cual sólo tendrá para retirarse lo que haya ahorrado en este instrumento— 36%, lo que representa poco más de 20 millones, está conformado por jóvenes de 33 años o menor.

En su totalidad, esta generación constituye 53% de las cuentas totales administradas por las Afore.

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