Qué conflicto debe ser para la presidenta Claudia Sheinbaum intentar reconstruir lo que su querido antecesor, López Obrador, destruyó.
Las administraciones morenistas son expertas en destruir instituciones y culpar al pasado de los problemas que enfrenta nuestro país, pero la presidenta debe reconocer que el pasado es también el gobierno anterior que, en su intento por tener el control político, dejó un desastre en el abasto de medicamentos.
El sistema de suministro de medicinas era deficiente desde hace varios sexenios. Sin embargo, López Obrador usó su bandera de combate a los monopolios y la corrupción para dejar las cosas mucho peor de lo que estaban. Porque a él no le gustaban los monopolios… que no lo beneficiaban. La corrupción le parecía intolerable, mientras no fuera útil para sus propios intereses. La política de compra y distribución de medicamentos en el sexenio pasado fue una secuencia de fracasos e improvisaciones.
En el primer fracaso concentró las compras de prácticamente todas las instituciones, incluidos los institutos de alta especialidad, en la Oficialía Mayor de Hacienda. En el segundo, modificó la Ley de Adquisiciones para asignar a un organismo internacional la compra de medicamentos. Su tercer error fue pasar dichas compras al recién creado Insabi y, por último, echó mano de Birmex para construir la farmacia más grande del mundo que alcanzó a surtir apenas tres recetas diarias.
El reto que tenía en aquel entonces el gobierno era corregir las irregularidades. No destruir por completo los procesos y las instituciones.
De acuerdo con una nota publicada por EL UNIVERSAL, durante el 2024, el IMSS no surtió 4 millones 527 mil 281 recetas, lo que representa que más de 11 millones de piezas de medicamentos no fueron entregadas a mexicanas y mexicanos que padecían una enfermedad.
En medio de esta cruel crisis de medicamentos, la semana pasada la Secretaría Anticorrupción anuló el proceso de licitación para la adquisición de medicamentos, insumos médicos y material de curación correspondiente al periodo 2025-2026, luego de que detectó irregularidades de Birmex. En el proceso de licitación, participantes consideraron un desastre el ejercicio, debido a que las especificaciones técnicas, jurídicas y económicas eran deficientes desde su publicación.
La Presidenta está ante la disyuntiva de trabajar sobre escombros de procesos que su antecesor se encargó de destruir con la disfuncionalidad del Estado como precio o adentrarse a una revisión de nuevas alternativas, en las que se valore traer a personal técnico, capacitado en adquisiciones. Debe dejar atrás la premisa de 90% lealtad, 10% capacidad.
Un buen gobierno siempre buscará soluciones. A un mal gobernante siempre le sobrarán pretextos para evadir responsabilidades… como ya saben quién.
Claudia Sheinbaum aún está a tiempo. Puede volver a culpar a las farmacéuticas y a funcionarios de gobiernos del PRI y el PAN o, con humildad, reconocer que la actual estrategia tampoco funciona. Se requiere de voluntad política para corregirla.
Comentario final
Una pérdida irreparable la muerte del gran escritor peruano Mario Vargas Llosa. Extrañaremos su pensamiento crítico, su libertad para escribir y, sobre todo, al hombre que con gran firmeza y argumentos sólidos, criticaba el autoritarismo y la tiranía en América Latina. Abrazo a sus lectores. Celebremos su vida y obra.
Ciudadana. @XochitlGalvez