Nos dicen que si hace algunas semanas alguien le preguntaba al legislador morenista Ricardo Monreal si tenía interés en buscar la candidatura a la jefatura de gobierno de la Ciudad de México, el senador contestaba de inmediato “no, que no le interesaba”, que él estaba firme en su intención de obtener la candidatura presidencial. Sin embargo, nos relatan que esa misma semana durante una comida nuevamente se le preguntó a don Ricardo si le habían ofrecido la candidatura a la CDMX, y esta vez respondió que por ahora no podía hablar de ese tema. ¿Algo habrá cambiado? ¿Su regreso a Palacio Nacional y su gran sonrisa en la foto junto al Presidente tendrán algo que ver con el tema? O será que, fiel a su costumbre, don Ricardo Monreal como dice una cosa dice otra.

El abuelo del Plan C

El presidente Andrés Manuel López Obrador ha anunciado que va por su Plan C, que incluye ganar la mayoría en el Congreso en 2024 y presentar una iniciativa para que los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), sean electos por voto popular, para que en el país exista un gobierno total del pueblo, es decir, que los poderes Ejecutivo, Legislativo y Judicial sean electos por voto de los ciudadanos. Con esta iniciativa, el presidente López Obrador se convertirá en el padre del Plan C. Pero ¿sabe usted que este plan tiene un abuelito? Sí lo tiene y se llama Manuel Barttlet Díaz, actual director de Comisión Federal de Electricidad, quien, como opositor en 2015, cuando era el coordinador del Partido del Trabajo en el Senado, presentó una iniciativa para reformar la Constitución a fin de elegir por voto directo del pueblo a los ministros de la SCJN, a los magistrados electorales de la Sala Superior y a los de las Salas Regionales del Poder Judicial de la Federación.

Cuitláhuac García trasladará el gobierno de Veracruz a la CDMX

Nos cuentan que el plantón que hará el gobernador de Veracruz, Cuitláhuac García, frente a la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) no sólo competirá con el que ya está instalado ahí, en proferir insultos a los ministros, sino también en ver cuál de los dos tendrá menos congregados. Nos dicen que hasta el momento sólo han confirmado al mandatario su asistencia los diputados locales de Morena, pero, de ahí en fuera, ningún otro funcionario o líder morenista se ha pronunciado por participar en la excursión a la sede del Poder Judicial. Nos hacen ver que habrá que dar marcaje personal a don Cuitláhuac y sus legisladores para constar que dormirán en el campamento las noches que sean necesarias para defender a la democracia, y que no sólo vendrán el fin de semana a instalar la tienda de campaña y luego se regresen a gozar de la vida a Veracruz. El gobernador quizá esté pensando ya en trasladar el gobierno de su estado a la Ciudad de México, pues él está dispuesto a hacer cualquier sacrificio para garantizar la transformación del país.

Crece la guerra de las bardas

Los operadores del canciller Marcelo Ebrard emprendieron acciones contra el borrado de las bardas que ellos han pintado en apoyo a don Marcelo, y que aseguran son eliminadas por trabajadores del Gobierno de la Ciudad de México. Nos dicen que los simpatizantes han salido a los lugares donde se borraron las muestras de apoyo para volver a colocarlas, he incluso han sumado la frase “Nos borran una barda, pintamos 10”. Por su parte, el gobierno capitalino ha respondido que es falso que exista una estrategia para borrar las bardas de Ebrard, y ha dicho que retirará todas las pintas de este tipo sin importar a quién apoyen. Parece que el llamado del presidente de Morena, Mario Delgado a los aspirantes a “no calentarse” y a no pintar bardas, ha sido borrado por las corcholatas presidenciales.

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