El hijo de Marcovich marca distancia

En medio de las acusaciones de violencia familiar contra Alejandro Marcovich, que exhibió recientemente la periodista Lydia Cacho, el más afectado, nos enteramos, es Diego, el hijo mayor del exguitarrista del grupo Caifanes. El joven tiene una historia con su papá que se niega a hacer pública, como ya lo hizo su hermana; entre lo que narran sus cercanos es que el músico casi lo abofetea y lo corre de su casa. Diego ha preferido marcar distancia de toda la familia para evitar las confrontaciones y dedicarse a lo suyo, que es el arte y que se ha convertido en un refugio en estos tiempos de tormenta.

Los integrantes de OV7 se enfilan para despedir la gira con la que están celebrando sus 30 años como banda y quieren hacerlo en grande, en un concierto en un lugar donde tengan garantía de éxito, como el Auditorio Nacional. Porque, a diferencia de Guadalajara, donde han tenido aforos de alrededor de 60%, es en la Ciudad de México donde llenan y encuentran a un público que les demuestra fidelidad, más allá de los conflictos internos entre los cantantes. El problema, nos enteramos, es que no encuentran fecha disponible, pues los espacios para la temporada del Coloso de Reforma, al menos para la primera quincena de diciembre, ya están ocupados, entre clásicos como “El Cascanueces” y ellos, simplemente, no se quieren ver más.

Darán dos shows este fin de semana en el Auditorio Nacional.

Falta poco para que se anuncie otro concierto de una figura internacional en México: el de Beyoncé, que con su Renaissance World Tour promete un récord: ser el más costoso de todos, más que los de Taylor Swift (10 mil 450 pesos), Madonna (hasta 11 mil 600) o Michael Buble (7 mil 125). Sobre la estrella estadounidense hay mucha expectativa, sobre todo porque hace una década que no visita el país y gira es una de las más prometedoras del año. ¿Estarán dispuestos sus fans a pagar el boleto?