El presidente ruso

, Vladímir Putin , informó hoy de los pasos prácticos que da Rusia para evacuar a la población civil siria de las zonas más calientes del país árabe, en una conversación telefónica con su colega francés, Emmanuel Macron , y la canciller alemana, Angela Merkel.

"Putin informó de los pasos prácticos emprendidos por la parte rusa para evacuar a la población civil, enviar cargas humanitarias y prestar ayuda médica a los habitantes de Siria", señala un comunicado difundido por el Kremlin.

Según esta nota, los tres dirigentes se congratularon de la aprobación anoche de la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU que exige a las partes beligerantes una tregua inmediata durante treinta días en todo el país.

En ese contexto, Putin subrayó que la "suspensión de las acciones militares no se extiende a las operaciones contra los grupos terroristas", añade el comunicado de Presidencia rusa.

Indica que las partes acordaron "activar el intercambio de información a través de distintos canales sobre la situación en Siria".

Por otra parte, Rusia pidió hoy a los países que apoyan a la oposición siria que ejerzan su influencia sobre estos grupos para garantizar el cumplimiento de la resolución del Consejo de Seguridad.

"Confiamos en que los patrocinadores extranjeros de los grupos armados (de la oposición) hagan por fin sus deberes y garanticen el cese de la actividad militar de sus patrocinados, para un tránsito de convoyes humanitarios lo más rápido y seguro posible", resalta un comunicado difundido por el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso.

Ni la Cancillería rusa ni el Kremlin han hecho referencia alguna a los bombardeos lanzados contra la zona de Guta Oriental, después de que se aprobara la resolución, pese a que esa zona de las afueras de Damasco figura expresamente en el documento de la ONU.

Tanto Moscú como Damasco sostienen que Guta Oriental está controlada por las milicias del grupo terrorista Frente al Nusra (antiguo aliado de Al Qaeda), por lo que podrían usar este argumento para justificar la campaña de las fuerzas gubernamentales sirias en esa región.

En una semana de intensos ataques aéreos, de artillería y con misiles, el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos ha denunciado la muerte de al menos 510 personas, entre ellos 127 menores.

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