Pobladores cierran cinco horas la México-Toluca

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Ocoyoacac, Méx.— Por más de cinco horas, vecinos de San Pedro Cholula mantuvieron cerrada la carretera México-Toluca, dirección Ciudad de México, luego de que la alcaldesa Anallely Olivares se rehusara a clausurar el fraccionamiento Town House y rompiera el diálogo con los inconformes.

La protesta inició cerca de las 11:30 horas frente al desarrollo habitacional que, dicen los pobladores, afectará a 13 mil colonos, pues a raíz de la edificación les disminuyó la dotación de agua potable, además la descarga de aguas negras del fraccionamiento escurrirá en su comunidad, donde no hay drenaje e históricamente se inundan cada año en temporada de lluvias.

Alrededor de las 12:00 horas impidieron el tránsito por la vía de acceso hacia la cabecera de Ocoyoacac, en la vía San Mateo Atenco-Santiago Tianguistenco, lugar al que llegó la alcaldesa morenista Anallely Olivares e intentó dialogar.

La gente le exigía a la edil clausurar la obra que inició en la administración de la priista Diana Pérez, apelando a la autonomía municipal.

La munícipe se comunicó con la directora de Desarrollo Urbano, quien aseguró que la administración local está impedida para cerrar la construcción que cuenta con 260 viviendas, pues violaría los permisos estatales.

Fue así que la edil propuso sumarse a la protesta, pero frente al palacio de gobierno, e incluso ingresar al edificio portando las pancartas de los manifestantes para que el gobernador Alfredo del Mazo resuelva el conflicto, pues admitió que han comprobado los daños que provoca a la comunidad el desarrollo.

Pero los habitantes se negaron y le exigieron cancelar la obra en ese momento o acompañarlos a cerrar la carretera para demostrar que cumpliría su palabra, porque en ocasiones anteriores se negó a escucharlos, entonces Anallely Pérez rechazó ambas opciones y se retiró del lugar.

Los inconformes caminaron hacia la carretera, a unos cuantos metros del primer bloqueo, y desde las 12:45 de la tarde colocaron vallas de plástico que tomaron de la obra del Tren Interurbano y atravesaron una camioneta para impedir la circulación en dirección a la Ciudad de México, hasta que llegó la Policía Federal, con quienes negociaron abrir el paso intermitente de vehículos por un carril.

El delegado de la comunidad, Antonio López del Campo, dijo que la empresa ARA, para limpiar el terreno, arrojó el cascajo a la laguna de San Pedro, además construyó un cárcamo para las aguas negras del fraccionamiento que “va a derramarse en nuestro poblado”.