Crónica. Sentencian a muerte a Jesuscristo en medio de contingencia por Covid-19

En tan sólo 37 minutos, el Senado, sacerdotes y fariseos, determinan en juicio sumario la sentencia de muerte de Jesucristo , en abierta violación a sus derechos humanos, pues en ese momento, durante el desarrollo del Primer Sinedrio, el hijo del Creador aún no es capturado.

Incluso, ahora Susana Distancia brilla por su ausencia, pues en el pasaje del lavado de pies, Jesús limpia a los 11 discípulos –pues para ese momento Judas ya negocia la entrega del Mesías–, con la misma toalla, con lo que si no los contagia del Covid-19 , posiblemente sufran de pie de atleta.

Lo mismo ocurre durante el Primer Sinedrio, desarrollado en la casa de Anás, donde el Ministerio Público y defensa constantemente rosan sus cuerpos mientras se mueven en el escenario, así como cuando los romanos juegan dados, olvidándose por completo de Doña Susana Distancia.

Con ello y con 14 minutos de retraso –pues la señal de televisión inició a las 20:14 horas--, este juicio ya iba muy avanzado, el cual se realiza a un costado del templo del Señor de la Cuevita, donde los organizadores previamente cortaron árboles, plantas y ramas, para levantar el escenario, sin que la Secretaría del Medio Ambiente tomará cartas en el asunto.

Puedes leer: El día que censuraron el Viacrucis de Iztapalapa

Es de destacar que mientras la alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada Molina , aseguró que “no serán más de 30 actores” en este Jueves Santo, y el Comité Organizador de la Semana Santa en Iztapalapa, AC (COSSIAC) sostuvo que “serán cerca de 40 artistas”, la realidad es que eran cerca de 70 los interpretes, que sumados a los técnicos de Cepropie y las televisoras, eran cerca de 100 personas.

Además, en la Última Cena, desarrollada en casa de José de Galimatea –en realidad fue a las puertas de la iglesia–, los 11 discípulos, a los que más tarde se les sumó Judas, están tan pegados que ni los inspectores del Invea se percatan de ello.

Aunque eso sí, cuando Jesús les pide “comer y beber”, cada uno lo hace con su jarro de barro, nadie toma del de su compañero, como lo hicieron en años anteriores.

Conforme al libreto, luego del Primer Sinedrio y la Traición de Judas, la imagen pasa a la Última Cena y al Lavado de pies, donde a las 21:40 horas hacen su aparición la Virgen María, madre de Jesús, y María Magdalena, quien le implora perdón por sus pecados.

Lee también: Así celebrará Semana Santa el papa Francisco por pandemia del Covid-19

Dos minutos después, Jesús y 11 de sus 12 discípulos bajan del templete, para dirigirse al Huerto de los Olivos (Getsemani), donde Judas lo entregará a los elementos de la Policía de Investigación --perdón, a los romanos--, que estaban inquietos por detener a este sujeto que ha levantado al pueblo de Jerusalén, y sublevarse contra Tiberio, monarca romano.

Mientras Jesús y su grupo cambian de escenario, la imagen regresa al Primer Sinedrio, donde Anás, senadores, sacerdotes, fariseos, fiscal y jurado, se reclaman, por haber confiado en Judas, quien no da señales de aparición.

A las 21:50 horas, Judas llega ante el jurado y todos se calman, y tras pedir 20 romanos para capturar a Jesucristo, Anás le arroja las 30 monedas de plata, que el “traidor” pidió como pago por entregar al hijo del Creador.

El fiscal ordena atar a Judas y pide a los judiciales –bueno, romanos, para entendernos--, acompañarlo para cumplimentar el mandamiento legal.

Sin embargo, cuando todo está listo para la captura de Jesús, la producción corta la imagen a las 22:11 horas, para aparecer sus conductores e invitados especiales, quienes por espacio de 13 minutos comentan la escenificación de este Jueves Santo .

También lee: Cómo sería la Semana Santa rarámuri si no hubiera pandemia

Cuando regresa la imagen, Jesús y sus 11 discípulos ya están en el Huerto de los Olivos, donde el Mesías, con su inseparable guarura –que dicen es el Arcángel San Miguel--, entabla un prolongado y cansado diálogo con Luzbel, donde el guardaespaldas de Jesucristo por fin habla y pide “paz a los hombres de buena voluntad”.

En ese mismo lugar, una vez que sale de escena Satanás, habla el Trébol de Judea, donde lamenta que nadie la toma en cuenta y pide a Jesús una gota de sangre y una semilla de sus palabras. Jesús le responde que la sangre la podrá tomar de su corona de espinas antes de ser sacrificado.

Más tarde, les anuncia a sus discípulos que pronto llegarán para aprehenderlo, lo cual es anunciado con las cuatro trompetas de romanos, que indican cada cambio de escena.

Sale al encuentro de los que llegan por él y pronto Judas le da un beso, con lo que los romanos identifican a su presa, como previamente convinieron con el traidor.

De allí que la policía del Sanedrín, conducen a Jesús ante las distintas instancias que debatirán su nuevo enjuiciamiento. Para ello, el reloj marcaba las 23:00 horas. Y nuevamente la producción corta la imagen.

Luego de cinco minutos, aparece la escena con Jesús ya amarrado y es conducido para el Segundo Sinedrio, aunque ahora en casa de Caifán, pues Anán, como Poncio Pilatos, decide lavarse las manos.

Aunque no hubo testigos, pues sus discípulos huyeron en cuanto Jesús fue apresado, su captura corrió como reguero de pólvora por toda la moderna Jerusalén, por lo que este viernes la autoridad prevé la llegada de una multitud, en defensa del hijo del Supremo.

Para lo cual, la alcaldía y la Secretaría de Seguridad Ciudadana continuarán con un celoso operativo, a fin de evitar que la gente y simpatizantes de Jesucristo intenten ingresar al Santuario de Nuestro Señor de la Cuevita, donde, según les informaron los judiciales, será crucificado por tarde de este viernes.