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El robo a casa-habitación es uno de los delitos más redituables en la Ciudad y de los que más se cometen, sólo durante el primer semestre de 2017, la procuraduría capitalina ha registrado un total de 3 mil 376 casos, superando 10% lo sucedido en el mismo periodo del año pasado, cuando las carpetas de investigación totales cerraron en 5 mil 565 denuncias.

Al igual que en 2016, en este año ni artistas, comediantes, políticos, empresarios o personalidades del espectáculo se salvaron de ser víctimas de este delito. El repunte se muestra también en los robos con violencia, donde los delincuentes amagan, golpean y amedrentan a sus víctimas mientras vacían sus domicilios.

El año pasado cerró en este rubro con 478 carpetas de investigación, mientras que en las estadísticas en el primer semestre del año en curso se han contabilizado 251 eventos. De continuar con esta tendencia, los robos a casa-habitación con violencia superarán también los de 2016.

Las estadísticas que se pueden consultar en el portal de la procuraduría local detallan que el robo a casa se comete primordialmente en el transcurso del día o en temporada vacacional, por lo que regularmente no hay nadie cuando ingresan, de esta manera se cataloga sin violencia.

En este caso el año pasado cerró con 5 mil 87 eventos, mientras que durante los primeros meses de 2017 se han contabilizado 3 mil 376 hechos en donde no se ha ocupado la violencia para profanar los domicilios.

Aunque las autoridades investigadoras identifican a por lo menos tres bandas organizadas dedicadas sólo a este negocio, existen otros cuatro grupos que de manera ocasional también roban casas, principalmente en las delegaciones Cuajimapla, Miguel Hidalgo, Benito Juárez, Coyoacán y Tlalpan, lugares en los que se concentra este delito.

Con las investigaciones de los elementos de la procuraduría capitalina, que se han nutrido con diversos videos de las cámaras de seguridad, se detuvo a 20 delincuentes de dos bandas delictivas; sin embargo, se ha logrado establecer que desde prisión, los imputados siguen ordenando qué domicilios robar.

“Los detenidos han confesado que tienen un stock de casas por robar, saben en qué meses o cuándo están solas, sólo esperan el momento exacto y roban, porque también saben que la vigilancia es poca en las casas”, confió un agente investigador cercano a la fiscalía que investiga el delito de robo a casa-habitación.

Piden que este delito se considere grave. El delito de robo a casa-habitación es considerado por las autoridades como de “bajo impacto” y así se castiga, la penalidad máxima cuando un imputado es procesado con violencia es de apenas cinco años, mientras que el daño que ocasiona a los afectados es mucho, algunas víctimas incluso cambian de domicilio por el temor generado.

Por esta situación, afectados y especialistas piden a las autoridades agravar el delito, aunque sea sin violencia, de lo contrario el robo a casa-habitación seguirá creciendo.

De agravarse este delito, los años en prisión podrían ser más y con un castigo ejemplar, gradualmente, irán disminuyendo. Según expertos, de esta manera y con mayor atención de los moradores de las viviendas afectadas se puede combatir este delito, el segundo más cometido en la Ciudad después de robo a transeúntes.

“Si hablamos de 3 mil robos y apenas hay 20 detenidos, entonces el negocio es muy lucrativo y no les importa pasar dos o tres años en la cárcel por eso”, comentó Daniel Pineda Orozco, sociólogo por la UAM.

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