Hermosillo.— El colectivo Guerreras Buscadoras de Sonora localizó un cementerio clandestino en el campo 30, municipio de Cajeme. Hasta la tarde de ayer, habían encontrado 25 cuerpos, 22 masculinos y tres femeninos.

María Teresa Valadez Kinijara, líder del grupo integrado por familiares de desaparecidos de los municipios de Guaymas y Empalme, principalmente, informó que continuarán la búsqueda en el lugar.

“No es un orgullo nuestro hallazgo, es un descanso que van a tener 25 familias que tendrán a sus familiares”, expresó.

El 31 de marzo hallaron ocho cuerpos, de los cuales tres eran mujeres y cinco hombres.

Especialistas del Laboratorio de Inteligencia Científica Forense (CIF), de la Fiscalía General de Justicia del Estado (FGJE), realizan los análisis para establecer las identidades de los cuerpos mediante comparativos de ADN.

La FGJE informó que brinda apoyo total al colectivo Guerreras Buscadoras de Sonora, además de la apertura en las investigaciones.

Dentro del Nuevo Modelo de Fiscalía, encabezado por Claudia Indira Contreras Córdova, en enero se formalizó el respaldo con la apertura de los expedientes de identificación de personas desaparecidas.

Se apoya a los colectivos Guerreras Rastreadoras de Sonora y Familiares de los Desaparecidos de El Fuerte y Zona Norte de Sinaloa, con seguridad y trabajo dentro de sus búsquedas.

Además, los expedientes de la fiscalía están abiertos para que sean cotejados con el ADN, para revisar si algún cuerpo localizado corresponda a algún familiar que sea buscado, dio a conocer.

También en Sinaloa. Las rastreadoras de El Fuerte, Sinaloa, que encabeza Mirna Nereyda Medina Quiñones, iniciaron una búsqueda en las inmediaciones del estero de Juan José Ríos, el pasado viernes, y en 24 horas habían localizado los restos de 14 personas.

“Tenemos sentimientos encontrados, la verdad se siente muy triste, pero seguiremos, los buscaremos hasta encontrarlos, nos faltan todos”, dijo.

Sólo con una varilla en mano que introducía en la tierra, Maky, quien busca a su hijo Juan Francisco Angulo, encontró ocho cuerpos el pasado viernes. Todavía no sabe si uno de ellos es su tesoro, como le llaman a los familiares desaparecidos.

“Que lo ando buscando y Dios lo bendiga donde esté”, expresó en un mensaje que envió a su hijo.

Es importante que tengamos la prueba genética, dijo Mirna Nereyda, ya que los cuerpos tienen hasta dos años sepultados.

Al lugar acudió el vicefiscal de Justicia de la Zona Norte, Arnoldo Serrano, acompañado de un equipo de investigadores y peritos forenses, quienes acordonaron el área.

Luego de la exhumación, trasladaron los restos humanos a los laboratorios de genética de Culiacán para practicar las pruebas de ADN, a fin de hacer el cruce de información con las fichas de búsqueda.

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